Julio César Hernández
 
De manera sorpresiva el PRI dio a conocer que su nuevo secretario de Organización es Salvador Rizo Ayala, ex aspirante a la candidatura a la alcaldía de Zapopan.
 
De inmediato se entendió este nombramiento como resultado de la negociación que Guízar Macías hizo con Rizo Ayala para que declinara de seguir en la carrera por la alcaldía, tras de que se había tomado la decisión con antelación de que el candidato sería Héctor Vielma Ordoñez.
 
El anuncio se hizo a través de un comunicado de prensa que no explica en qué condiciones queda Manuel Carrillo Rubio, quien ocupaba esta cartera pero que también hacia las veces de secretario general, luego de que la titular Patricia Retamoza solicitó licencia al cargo por 60 días, pues es candidata a diputada local -mañana será ratificada en la asamblea de delegados como candidata única-, por el distrito 15.
 
La duda es qué pasará cuando concluya la licencia de Retamoza. ¿Regresará a ocupar la secretaría general o ya no y se quedará de manera definitiva Carrillo Rubio? Y si regresa, ¿cuál será el espacio para el regidor en el Ayuntamiento de Atotonilco, mientras llega el día en que, si los resultados se lo permiten regrese al Congreso, al que se asegura legará por la vía plurinominal?
 
Otra pregunta que surge con el nombramiento de Rizo es si en la negociación para hacerse a un lado en Zapopan entró también un espacio para su hijo del mismo nombre o su vástago fue “sacrificado” a cambio de la Secretaría de Organización.