Casi 50 taxistas cerraron a la circulación Av. Acueducto y Av. Patria, era sábado, y el reloj marcaba las 2:30 de la madrugada. Los manifestantes pertenecían a diferentes sitios de la ciudad, pero de noche trabajan afuera de los bares y restaurantes de la zona de Plaza Andares, y la colonia Providencia.

El motivo de su protesta era el aumento de carros particulares que llegaban a recoger pasaje a los negocios de la zona, al ser llamados mediante una aplicación telefónica. Era 4 de enero de 2014, iniciaban así las protestas contra los servicios de transporte contratados vía aplicación telefónica. Los manifestantes era choferes de taxi, no dueños de permisos, ningún secretario de sitio se apersono en el lugar, y ante la autoridad no consiguieron nada. La aplicación contra la que protestaban era: CityDrive.

No imaginaban los entonces manifestantes que un año y medio después, se llegaría incluso a la violencia por parte de otros taxistas, contra los choferes de la aplicación UBER, o contra quien a su juicio lo pareciera.

De competencia desleal acusan los taxistas a quienes proporcionan servicio de transporte vía aplicación telefónica, en las recientes manifestaciones, y conatos de bronca que se han vivido los últimos días en nuestra ciudad, aparecen los mismos grupos, las mismas caras, los mismos discursos, los mismos números de Sitios…

¿El problema es UBER o los altos costos que aplican los taxistas que hacen Sitio afuera de los antros y restaurantes?

Puede usted transitar por Av. Patria y tratar de pasar por la calle Real Acueducto, encontrará filas de taxis haciendo Sitio de los dos lados de la calle, esperando realizar viajes que se cobran sin taxímetro, y a un costo elevado. En el mismo caso se encuentran los taxistas que hacen Sitio por Av. Américas, a un costado del hotel Aloft. Dos ejemplos actuales y cotidianos, ante los cuales Movilidad no hace nada.

Estos grupos de taxistas organizados por medio de radios de comunicación, se identifican como agrupación por medio del canal de banda civil por el que transmite, o por un nombre específico que llegan a portar en sus carros. Este tipo de agrupaciones de taxistas surgieron de la necesidad de protección ante los asaltos, sobre todo en el turno nocturno. Después empezaron a apropiarse de lugares, para ser ellos quienes de forma exclusiva y bajo sus cuotas, realicen los traslados de los clientes del lugar. No fueron apoyados en su momento por Sitios oficiales, porqué llegan a estar enfrentados por causa de la disputa violenta, de los lugares que cubren unos y otros. Recordemos los casos más recientes: Plaza Galerías que ganó el Sitio 88 al “Grupo canal 17” y, “La Gran Plaza” que ganó el Sitio 22 al “Grupo canal 32”.

Así pues, los primeros en beneficiarse con el sistema de transporte por medio de aplicación, fueron los jóvenes que los fines de semana salen de fiesta; podían salir del antro y subir a un auto último modelo, ante la mirada de aquellos taxistas que se habían saboreado un cobro mínimo de $200 pesos por salida, así fuera a unas cuadras. Estas agrupaciones de taxistas, fueron las primeras “afectadas”, pero por no ser significativas sus quejas para la autoridad, no pasó nada.

¿El problema es UBER o los altos costos que aplican los taxistas que hacen sitio en los hoteles?

En las agresiones a los conductores que prestan sus servicios bajo la plataforma de UBER, destacan las acciones de los Sitios 22 y 37, quienes dominan la zona Minerva, y Chapalita. Tarifas sin taxímetro, zona de Sitio donde no debe existir, desprecio por los viajes cortos para los residentes de la ciudad cuando están cubriendo eventos en Expo Guadalajara, camionetas tipo SUB con permiso de taxi, pero cobrando una cuota más alta por servicio –fuera de todo control por parte de Movilidad-, agresiones directas a otros taxistas cuando defienden su exclusividad en Expo Guadalajara. Son algunas de las características de estos Sitios, que transportan a la gran mayoría de turistas que visitan nuestra ciudad y se hospedan en hoteles de la zona Minerva-Plaza del Sol.

Pero no me den por buenos a los Sitios 3, 5, 7, 29, 47, que también tienen a su disposición turistas para explotar.

¿El problema es UBER o los altos costos que aplican los taxistas que hacen Sitio en la Nueva Central Camionera, o las centralitas que ahora pusieron por Periférico y Av. Vallarta?

Famoso por sus precios caros, el no usar taxímetro, la molestia al tener que sujetarse a los boletos de pre-pago, y las agresiones a otros taxistas que intenten levantar pasaje en su zona; el Sitio 61 goza de total impunidad por parte de las autoridades estatales y federales. Es increíble que algunos viajes de la Nueva Central Camionera a un destino de la zona metropolitana, sean más caros que salir de Guadalajara a visitar otra ciudad.

Por supuesto el Sitio 52 ya aprendió a cobrar, y aplica a los llegados a la terminal de Av. Vallarta tarifas fuera de todo control. El Sitio 74 hace lo propio en Periférico y Colon. En López Mateos y Periférico, los taxistas agrupados como “Los Gavilanes” hacen de las suyas con quienes llegan por la carretera a Morelia.

¿El problema es UBER o los altos costos que aplican los taxistas que hacen Sitio en el Aeropuerto?

Cundo vives en Guadalajara y se tiene que viajar por avión, o llegar a la ciudad por el aeropuerto, con todo y pena, pero uno busca alguien que lo lleve o lo recoja; y es que el costo de taxi al, o del aeropuerto es alto. Por supuesto esto tiene años siendo así, y de nada han servido las recurrentes quejas que se le han presentado a la autoridad, simplemente el Sitio del aeropuerto es intocable.

En Guadalajara un taxista puede cobrar lo que quiera, sin temer una revisión a sus tarifas o al uso de taxímetro por parte de la autoridad. Recordemos que fue hace más de siete años que se ajustó la tarifa en esos aparatos, hasta hoy no se ha actualizado; y el gremio taxista no lo necesita, se basta solo para actualizar sus cobros.

Entonces, cuando aparecen aplicaciones que permiten evitar a estas mafias de Sitios, que condicionan el servicio al pago de un costo fuera de la ley; por supuesto que serán utilizadas por aquel que esté en condiciones de aprovecharlas.

Llegar a Guadalajara por primera vez y saber que funciona UBER u otra aplicación, le da al visitante la seguridad de traslado, pues la aplicación proporciona datos del chofer, vehículo, y ruta de traslado, evitando el estrés de subirse a un taxi desconocido.

Llegar a Guadalajara para un visitante frecuente, y saber que existe UBER o cualquier otra aplicación, le da al visitante la seguridad de poder librar el costo excesivo en sus traslados, pues la aplicación da por adelantado el costo del viaje –que por lo regular es hasta 50% más bajo que el servicio de un taxi tradicional-, evita el traer efectivo, y además se le factura ese gasto.

Revisando el funcionamiento de éstos Sitios en Guadalajara, ¿El problema es UBER?