Los priistas que se han alineado en contra de Javier Galván Guerrero, el presidente del Comité Directivo Estatal del PRI en Jalisco, esperan con ansias los resultados de la elección de la Dirigencia Nacional que se celebrará el próximo domingo.
Esperan que la renovación del CEN sirva para impulsar la renovación en cascada de los comités estatales y así sacar a Galván de la Presidencial del PRI en el Estado.
Debe recordarse que después de la elección de julio del 2006 Arturo Zamora Jiménez hizo el intento de convertirse en el dirigente estatal del PRI, desplazando a Galván Guerrero.
Pero el actual Diputado Local salió más hábil que Zamora y se mantuvo en el cargo.
El segundo intento de los zamoristas contra Galván se dio cuando llegó el momento de decidir quien sería el coordinador de los Diputados del PRI en el Congreso del Estado. La idea era ofrecer a Galván la Coordinación a cambio de dejar el CDE priista. Pero esta partida también la ganó Galván al impulsar a su aliado Juan Carlos Castellanos Casillas como Coordinador y manteniendo la dirigencia estatal.
Con la espina aún clavada y deseosos de venganza, los zamoristas y antigalvanistas esperan que el resultado del próximo domingo les dé un margen de maniobra para pedirle a la nueva dirigencia nacional la renovación del CDE.