Por Hugo Luna
Las familias europeas han tenido la virtud de trabajar incansablemente para que sus vástagos tengan un mejor futuro. Caso contrario en nuestra patria donde la irresponsabilidad ha generado excesos, ineficiencias y subdesarrollo, estamos hipotecando el futuro de nuestros chamacos.
 Solamente tenemos una ruta a seguir; a través de liderazgos capaces, transparentes, que presionen y que en su momento asuman posiciones de poder impulsando a las generaciones venideras que sean capaces de solucionar los problemas estructurales que les permitan un mejor futuro.
El comentario viene con relación a la Conferencia Mundial de la Juventud 2010 celebrada en León, Guanajuato hace algunos días. Las conclusiones emanadas de la misma (están en proceso de revisión), para presentarlas a la Asamblea de las Naciones Unidas a finales del presente mes para analizar su cobertura en la agenda de objetivos de desarrollo del milenio.

La declaración Guanajuato (www.youth2010.org), es un documento que manifiesta:

  • Que los jóvenes son actores claves para el desarrollo.
  • Existen enormes retos para lograr su inclusión social y económica.
  • Así como evitar que un número importante de jóvenes del mundo (y de Jalisco) padezcan pobreza, desempleo, inseguridad, injusticia, falta de acceso a la educación y a la tecnología. 
  • Señala también que los jóvenes pueden contribuir a sus familias, a la sociedad, a través de su creatividad, capacidad de innovación, idealismo propio de su edad. Por ello recomienda su atención preferencial para incorporarlos al desarrollo.

 Nos encontramos con un texto plagado de buenas intenciones, técnicamente adolece de los “cómos” para lograr los objetivos.
La prioridad es la inclusión de los chamacos en desarrollo por medio de los presupuestos necesarios para lograr materializar las buenas intenciones. Otra situación es contra con las representaciones sociales capaces y honestas (nada que ver con las dirigencias juveniles del Consejo Coordinador de Cámaras Industriales de Jalisco o el Consejo Agropecuario de Jalisco, sin omitir a los partidos políticos), Aquí radica el problema.
Debemos trabajar con inteligencia para proporcionar calidad de vida a niños y jóvenes o de plano vamos en camino en la ruta del México fracasado, situación que El Chapo Guzmán, El Mayo Zambada, Juan José Esparragoza, El Azul, Heriberto Lazcano y Miguel Treviño capitalizan a través de sus amplios tentáculos para emplear decenas de jovencitos.
Me quedo con la siguiente reflexión ¿Qué mueve a los jóvenes para ser gatilleros del narco?