El incremento de casos de contagio y fallecimientos por Coronavirus o Covid-19, agarró a la mitad de los estados de la llamada Alianza Federalista… con los “dedos en la puerta”.
Y ni oportunidad tuvieron siquiera de importar el famoso y polémico “botón de emergencia” que en su reunión celebrada en Durango, en julio pasado, el gobernador Enrique Alfaro Ramírez les propuso que adoptaran. Es más, ni siquiera lo analizaron y dejaron en el discurso los acuerdos que supuestamente asumieron en torno a la pandemia, que presuntamente ha sido motivo para sus encuentros en diversos estados sedes.
Incluso, con menos casos de contagio confirmados y de fallecimientos que Jalisco, en Chihuahua se pasó del semáforo amarillo al rojo y el gobernador Javier Corral decidió imponer la “ley seca” los fines de semana y restringir la movilidad a partir de las 10 de la noche, entre otras medidas.
Hasta ayer, Chihuahua tenía registrados 21 mi 178 casos confirmados según las cifras locales -15 mil 521 según la Secretaría de Salud Federal-, mientras que los fallecimientos llegaron a los mil 699 -mil 718 la cifra federal-, mientras que Jalisco reportaba hasta ayer 32 mil 193 casos positivos y 3 mil 807 fallecimientos. Tan sólo ayer las muertes reportadas en las últimas 24 horas fueron 40 y 311 casos positivos.
Y mientras en Chihuahua el gobernador Javier Corral ya decidió “fajarse los pantalones” e implementar medidas estrictas para evitar aumente el número de contagios, aquí en Jalisco seguimos con el famoso cuento de “ahí viene lobo” y nada que se activa el “botón de emergencia”, que de acuerdo a especialistas debió de haberse presionado ya desde hace varias semanas atrás, pero se han hecho malabares con los número para evitar hacerlo.
Quizás hoy el gobernador Alfaro nos tenga alguna sorpresa, luego de la reunión que sostendrá con la Mesa de Salud, aunque puede seguir un capítulo más de “ahí viene el lobo”.
Además de Chihuahua y Jalisco, otros estados de la Alianza Federalista que encendieron las “luces rojas” ante la alerta de un rebrote o aumento de contagios de coronavirus son Durango, Querétaro, Nuevo León y Aguascalientes, sin desconocer que en Guanajuato la cosa no es menos seria.
Ante este panorama que vive la mitad de las entidades de la Alianza Federalista, ¿podemos concluir que todo aquello que en sus reuniones han abordado dizque para combatir la pandemia de manera coordinada, sólo quedó en el papel y los discursos ante los medios de comunicación? Porque al parecer cada quién se “rasca con sus propias uñas”.
Así, pues, algo tendrán que hacer los gobernadores rebeldes de esta Alianza Federalista, porque contra lo que dicen en sus discursos la pandemia del Coronavirus comienza a hacerlos quedar mal, para desgracia de sus gobernados.