La Coparmex decidió declararle la guerra al presidente Andrés Manuel López Obrador…
¿O cómo podemos interpretar la decisión del dirigente nacional del sindicato patronal en el país, Gustavo de Hoyos, de crear en la estructura del organismo la figura de “vocero especial”, pero particulamente que haya designado como tal a un político como el polémico y criticado ex senador Javier Lozano Alarcón?
Pero además De Hoyos le puso apellido a su “vocería especial”: para “la defensa del Estado de Derecho”.
Nadie ignora el papel que en el plano político partidista Lozano Alarcón ha jugado en los últimos años como un gran polemista, un hombre “entrón”, hay quien lo califica de “pendenciero”, que le gusta el enfrentamiento verbal y la discusión, y el uso de un lenguaje muy florido, pero no creo que sea el perfil que en estos momentos requiere una institución como la Coparmex, y menos cuando en muchas entidades, como Jalisco, sus filiales reclaman el apoyo de López Obrador en la reactivacion económica.
Indiscutiblemente que Javier Lozano le sirve muy bien, en lo personal, a Gustavo de Hoyos, a quien el presidente ha acusado de convertirse en su adversario político por sus aspiraciones para ser el candidato del PAN a la gubernatura de Baja California, pero dudo mucho que le sea de utilidad a la Coparmex como institución.
¿O con qué cara el nuevo presidente de Coparmex Jalisco, Carlos Villaseñor, le puede pedir apoyo al gobierno federal y a López Obrador, luego de que el “vocero especial” de su dirigencia nacional le haya puesto una “arrastrada” y endilgado quién sabe cuántos calificativos como acostumbra hacerlo?
Para empezar, partidistamente Javier Lozano se ha manejado entre el azul y el buenas noches tricolor, pues con Carlos Salinas fue Director de Normatividad en la Secretaría de Hacienda; con Ernesto Zedillo fue Contralor en Pemex, subsecretario de Comunicaciones -con Carlos Ruiz Sacristán-, subsecretario de Comunicación Social en Gobernación -con Diódoro Carrasco-; vocero del PRI y luego de Francisco Labastida Ochoa en la campaña por la presidencia de la República. En 2005 renunció al PRI.
Luego con Felipe Calderón fue secretario del Trabajo y al año siguiente se afilió al PAN, con cuyo color fue Senador por Puebla y jefe de Oficina del gobernador poblano, Antonio Gali Fayad. En 2018 renunció al PAN y al día siguiente ya era vocero del candidato del PRI a la presidencia, José Antonio Meade.
Esta es la carrera política de Lozano, de quien valga hacer un recuento de algunos de los escándalos y muchos enfrentamientos, deslices y discusiones que ha tenido principalmente a través de sus redes sociales con políticos de todos los partidos y hasta con actores y actrices:
- Fue acusado por Zhenli Ye Gon de haberlo amenazado y obligado a guardar el dinero que le fue encontrado y confiscado al empresario chino.
- Se le responsabilizó de conflictos con el sindicato minero, de la quiebra de Mexicana de Aviación y de la extinción de Luz y Fuerza del Centro.
- Se peleó con Ricardo Anaya al que calificó de “el joven dictador”.
- Cuando se propuso reducir el salario a los altos funcionarios se le recuerda por su famosa frase: “¿Y luego a robar o qué…?”.
- Se peleó con los actores Gael García y Diego Luna, luego de que el primero lo comparó con Donald Trump por estar a favor de la Ley de Seguridad Interior que impulsaba Enrique Peña.
- Cuando Manuel Barbosa anunció que sería otra vez candidato a la gubernatura de Puebla, le dijo que “¡No tenía madre!”.
- Como candidato al Senado, huyó de Xicotepec, Puebla, para evitar la protesta de trabajadores del Sindicato Mexicano de Electricistas.
- En una cabina de radio, le negó el saludo al entonces gobernador electo de Baja California, Jaime Bonilla.
- Como candidato a senador, se publicó una fotografía donde recibió una camioneta Cadillac para su campaña, y en ella aparecía Othón Muñoz Bravo, alías “El Cachetes”, a quien se le identificó como líder huachicolero.
- Cuando el periodista Jairo Calixto dijo que en la Escuela Libre de Derecho había “puro desprestigio”, luego de que otro tuitero refirió que Lozano era maestro ahí, a ambos les dijo: “Y ustedes han de ser doctores en filosofía, punta de pendejos”, y luego retó a Jairo directamente: “El día que quieras nos echamos un debate. Mediocre”.
- Cuando la acriz Claudia Lizalde calificó de “brillante” la venta del avión presidencial, Lozano escribió: “Les digo que la pandemia de la pendejez es peor que el coronavirus”. Luego las mujeres se le fueron en contra en redes sociales.
- El Tribunal Electoral Federal lo multó por subir a su Twitter un espot contra Amlo en el que cuestionaba su capacidad para “manejar al país” debido a su edad, lo que se consideró una ofensa para las personas mayores.
- Cuando el gobernador Barbosa declaró que había un sector de la población, los pobres, que eran inmunes, Lozano escribió: “Llevo semanas diciéndolo: la pendejez es más contagiosa que el coronavirus. Esta se llama morenavirus”.
- Cuando una juez lo sentenció a pagarle $321.00 a Manuel Bartlett por daño moral -el hoy director de la CFE reclamaba 10 millones de pesos-, Lozano dijo que le iba a pagar con un billete de $500 y que se quedara con el cambio para que “se coma unas semitas, se tome un agua de jamaica y se le pase el coraje”.
- En mayo de 2019 subió a Twitter una foto sobre una marcha multitudinaria en el Paseo de la Reforma supuestamente contra AMLO, y escribió: “Cinco meses de gobierno. El Hartazgo”. De inmediato se le hizo ver que esa fotografía correspondía a una marcha por la paz en el 2006, cuando gobernaba Calderón.
- En agosto de 2019 criticó un espot de AMLO previo a su primer informe de gobierno, y escribió: “No por mucho madrugar se hacen menos pendejadas”.
- En febrero de este año, subió un video a sus redes y dijo: “No sé cómo se sientan ustedes, pero este presidente ya me tiene literalmente ¡hasta la madre…!”.
- Al entonces periodista de Proceso, Jenaro Villamil, lo calificó de “baboso”.
- Cuando Gerardo Noroña escribió que en los sexenios pasados se guardó “absoluto silencio” sobre desaparecidos y torturados, Lozano le respondió: “¿Absoluto silencio? Se necesita ser cínico y pendejo”.
- Cuando Plácido Domingo aceptó su responsabilidad en las acusaciones de acoso en su contra, luego de que Lozano lo había defendido, el vocero especial reculó de esta manera: “¡Qué poca madre! Y yo que pensaba que era toda una infamia en su contra”.
- Cuando Tatiana Clouthier escribió que esperaría para definir si era candidata a la gubernatura de Sinaloa o Nuevo León, Lozano redactó: “Mejor que se postule para la (escuela) nocturna. ¡Le urge!”.
- Cuando Alfonso Durazo declaró que no le darían ” concesiones al crimen uniformado”, Javier Lozano le reviró: “A quien no deben dar concesión es a la delincuencia organizada. Mediocres y cobardes”.
Esta es sólo una parte del perfil del ahora “vocero especial” de la Coparmex, para darnos una idea de quién se trata. Pero contra lo que cualquiera pueda decir sobre él, Javier Lozano Alarcón se definió así mismo en una entrevista con Raymundo Rivapalacio cuando fue designado vocero de Meade:
“Seré un hooligan con clase…”.
¿Será por eso que Gustavo de Hoyos lo contrató? ¡Qué comience el show…!