En días pasados, en el Congreso de Jalisco se aprobó agregar un préstamo (6 mil 200 millones) más a la deuda del Estado. La propuesta tuvo 28 votos a favor y 10 en contra.
De lo sucedido en el recinto legislativo el pasado viernes sorprendió la postura de la diputada del partido en el poder (Movimiento Ciudadano), Mara Nadiezhda Robles Villaseñor, quien votó en contra y presentó en tribuna una perfecta argumentación de su decisión. Dio cátedra de congruencia al objetivo supremo de su función: ser una representante genuina de los jaliscienses en estos tiempos modernos; la única quizá.
La legisladora aseveró que “mi disyuntiva no es deuda sí o deuda no; si el endeudamiento es de manera responsable estoy a favor”.
Resaltó la necesidad de claridad sobre el uso y destino del dinero señalando, que conocer el “para qué”y el “cómo” era importante. Además, manifestó su preocupación por la evidente violación que se cometería con lo propuesto al Artículo 48 de la Ley de Presupuesto que determina que lo único que no puede afectarse al hacer cambios presupuestales es el desarrollo social.
El errante actuar del Gobernador y sus maromas financieras previas a la propuesta del multimillonario endeudamiento dejaron entrever una mala ejecución del recurso público y que ahora pretenden enmendar su error pidiendo un préstamo con altos intereses y todo por la “mañosa” administración financiera, golpeando la estabilidad y el patrimonio de los jaliscienses.
Cabe recordar que antes de la jugada de los más de seis mil millones de pesos de deuda, el mandatario estatal quitó dinero del presupuesto ya aprobado y etiquetado a la educación, cultura e indígenas. Y mandó al presidente y diputado de Movimiento Ciudadano, Ricardo Rodríguez, a justificar que sí se le darían a la educación, cultura y a los indígenas dicho presupuesto, pero que era necesario pedir prestado.
Desdeño que los 30 inmaculados que se prestaron a pedirle al “dócil” Gobernador que era urgente endeudar al Estado, pero a sabiendas de que ellos no serán los responsables legales y con facultades de dar cuentas del desaseado proceso y mal justificado préstamo.
Mara Robles nació, creció y se desarrolló frente y de frente al poder; es hija de un médico, político y luchador social jalisciense. A pesar de ser parte del partido en el poder, la diputada sabía que al votar en contra no iba haber marcha atrás (a los acuerdos oscuros) al pago de millonarios intereses que nos costarán a los jaliscienses durante años, pero demostró que su escuela política y su ética personal no serían parte del cochinero que aprobaron sus compañeros legisladores de Movimiento Ciudadano, PAN, Verde Ecologista y una “flamante diputada de la esperanza” de Morena.
Si Jalisco tuviera por lo menos 38 diputados con la ética, experiencia, responsabilidad y vergüenza de Mara Nadiezhda Robles, lo más seguro es que de igual manera se hubiera aprobado el préstamo, pero la gran diferencia es que el Gobernador no seguiría siendo “el rey desnudo de Jalisco” y los jaliscienses, la Universidad, la cultura y los indígenas seguirían teniendo certeza y con ella, desarrollo social.
En mi próxima entrega para Marcatextos: “Origen es destino … Mara Nadiezhda Robles Villaseñor” podremos darnos cuenta del actuar y el porqué del voto en contra de la diputada de Movimiento Ciudadano.