Julio César Hernández
El alcalde Jorge Aristóteles Sandoval Díaz no puede zafarse de su responsabilidad y cargarle toda la responsabilidad de la situación de su contralor, Víctor Urrea Stettner, a la jefa de la Unidad Anticorrupción, Martha Susana Rodríguez, quien lo más que podrá hacer es recomendar que le descuenten el día jueves que no fue a laborar.
Martha Susana no puede hacer más, pero sí el alcalde Sandoval Diaz o el propio Víctor Urrea. O lo cesan o renuncia. Pero después de lo que sucedió ayer, el ex delegado de la Profeco no puede seguir como Contralor Municipal. Por su bien, por el del Ayuntamiento y por el de su amigo que aspira a la candidatura al gobierno estatal.
Por vergüenza, Víctor Urrea debe de volver a renunciar -si es que lo hizo ayer como oficialmente se informó-, y no dar marcha atrás. Por respeto a la ciudadanía tapatía, Urrea Stettner debe de dejar el cargo, luego de haberle mentido sin ningún rubor a los tapatíos. Y de paso, hasta indignado se puso.
Después de escuchar las declaraciones que le hizo a los reporteros el lunes anterior, asegurando que las versiones de que fue a Las Vegas, y no a Tucson, eran difamaciones y un ataque a la labor que desempeñaba como contralor, y quedar al descubierto de que mintió, lo menos que puede hacer es presentarle la renuncia a su jefe.
O Aristóteles Sandoval, por respeto a sí mismo y a la ciudadanía que gobierna y a los jaliscienses a los que aspira gobernar, debe de cesarlo. No porque Urrea no haya ido a trabajar el jueves o porque le dijo que se iba a Tucson y se fue a Las Vegas. No, ese no es el asunto.
El asunto es que el Contralor Municipal mintió abiertamente a todos. ¿O acaso va a hacer suya aquella célebre frase garcista de que “al fin y al cabo todos mentimos alguna vez”?
No sabemos por qué ayer se informó oficialmente -a través de la oficina de prensa del Ayuntamiento-, de que había renunciado y a los pocos minutos después -la misma fuente-, también oficialmente, se informó que se había retractado.
¿Deveras renunció voluntariamente? ¿Deveras se retractó voluntariamente? ¿Deveras se mantendrá en el cargo? ¿Deveras Aristóteles lo sostendrá en el cargo?
Recordemos que hasta ahora todo aquel funcionario que ha dicho: “No renuncio”, termina por hacerlo.¿Víctor Urrea será la excepción?
El alcalde Aristóteles tiene la palabra.
1 diciembre, 2010