Julio César Hernández
Uno de los argumentos que enarbolan los diputados que aprobaron la llegada de Francisco Morales Aceves a la secretaría general en sustitución de Carlos Corona Martín del Campo, es que “llegó la hora de que nosotros decidamos y actuemos como diputados”.
Y es que sucede que ahora ellos quieren reclamar su derecho a ser quienes tomen las decisiones en el Congreso del Estado y no aceptar una imposición más, luego de dos que les aplicaron.
Cuentan que, por un lado, primero les “impusieron” desde el CEN a Roberto Marrufo como coordinador y, posteriormente, resultado de una negociación entre el DF y Jalisco, les “impusieron” al propio Corona Martín del Campo como secretario general.
Dicen algunos de estos diputados que ahora les toca la decisión a ellos de definir quién llega en lugar de éste último, y que la decisión ya la tomaron la semana antepasada frente a su propio dirigente estatal, Rafael González Pimienta, y su coordinador Marrufo Tores.
¿Deveras les darán esa libertad de ser ellos quienes decidan quién será el nuevo secretario general o no les quedará otra salida simplemente que aceptar resignadamente la tradicional y bien arraigada “línea”, para disciplinarse muy a lo priista?