El quinto informe del gobernador Jorge Aristóteles Sandoval Díaz dejó claras dos de las principales deficiencias en comunicación política, que a lo largo de los últimos dos años han sido una constante.

1.- La información proporcionada al selecto grupo de invitados en el recinto donde se presentó el informe, NO llega realmente de forma entendible a la población general de Jalisco.

Algunos de los videos que se hicieron para difundir los logros de gobierno debieron ser presentados en el momento adecuado, buscando que fueran de fácil comprensión para el ciudadano común, y no esperar que llegara el informe anual para presumir el logro.

Los proyectos de inversión en ayuda social o en obra pública que funcionan bajo el esquema de presupuesto participativo, pocas veces especifica el porcentaje que aporta el gobierno del estado, motivo por el cual se llega a pensar que los municipios son quienes logran los mayores beneficios a la sociedad, dejando al gobierno estatal como un simple depredador de impuestos.

2.- Los peores promotores de los logros del gobierno estatal son los regidores priístas y diputados que jugaron como oposición desde el 2015.

Mientras los gobiernos municipales dirigidos por la oposición utilizan la menor oportunidad para presumir ante la ciudadanía las obras públicas y programas de ayuda generados en sus localidades, los regidores priistas mantuvieron una posición de simples comparsas, al grado de ni siquiera informar que en la mayoría de programas y obras municipales, el gobierno del estado entra con un porcentaje económico alto.

Ahora que la temporada electoral está presente, aquellos regidores y diputados priistas que se preocuparon más por ir en los negocios de los gobiernos de MC, no pueden ser tomados en serio como oposición, y menos cuando durante tanto tiempo dejaron de promover el actuar del gobierno estatal que es de origen priista.

Dicen que esta administración estatal priista ha sido muy efectiva, que ha logrado éxitos en diferentes áreas; sí hubiera existido la estrategia de comunicación adecuada y los políticos priistas que eran oposición hubieran actuado como tal; la sociedad jalisciense tendría tal vez en mejor estima el trabajo de la administración estatal.