Julio César Hernández
Aseguran que el futuro del perredismo en Jalisco estará sujeto a lo que suceda a nivel nacional respecto a si se adelanta o no la elección del dirigente nacional, pues hay quienes insisten en que Jesús Ortega debe de dejar el cargo antes de que concluya este año, a fin de que en el 2011 se llegue ya con la dirigencia que manejará la sucesión presidencial.
Dicen que si esto se concreta, entonces no será difícil que aquí en Jalisco se lleve a cabo también un relevo adelantado del actual dirigente Antonio Magallanes Rodríguez, y con ello el escenario perredista local pudiera modificarse.
¿Cómo? Minando la influencia del Grupo Universidad al interior del partido, apostándole a que éste prácticamente tiene todas sus fichas dentro del PRI, como es el caso del diputado federal Trinidad Padilla López, ex rector de la UdeG, y la ex dirigente del sindicato de académicos, hoy diputada local Patricia Retamoza, a la vez secretaria general del comité estatal, así como colaboradores de los alcaldes metropolitanos.
Cuentan que en la capital del país han estado muy atentos al conflicto abierto entre el alcalde de Tlajomulco, Enrique Alfaro Ramírez, y el líder del Grupo Universidad, Raúl Padilla López, aunque la que se encarga de responderle a cada ataque es la dirigencia estatal perredista, que hasta desplegados periodísticos le ha dedicado al edil tlajomulquense.
Claro, advierten que también dependerá de quien releve a Ortega en la presidencia,y ponen en primer lugar al actual senador Carlos Navarrete, quien sin embargo ha dicho que aspira a ser candidato presidencial y otros lo mencionan como potencial candidato a la Jefatura del Distrito Federal.
Total, que quizás a finales de este año o principios del próximo, advirtamos un nuevo escenario en el PRD Jalisco, pero de ello dependerá la postura que asuma el Grupo Universidad en los próximos meses frente a lo que se comience a “cocinar” a nivel nacional.