Sólo 200 millones de pesos le costó al PRI ablandar al bloque opositor, iniciando por los diputados del partido político Movimiento Ciudadano, quienes entregaron sus votos en el Congreso del Estado a cambio de dinero para obras que se realizarán en los municipios que su partido gobierna.
Clemente Castañeda, coordinador de los diputados del partido político Movimiento Ciudadano, ya se ha defendido y ha dicho que votaron a favor del presupuesto debido a que ya no hay discrecionalidad en el presupuesto, que era el principal argumento por el cual su líder moral, Enrique Alfaro Ramírez, había amenazado la semana pasada con interponer una controversia constitucional.
Para los perredistas, también hubo ajustes, pero convencerlos fue mucho más caro que lo que se destinó para el partido Movimiento Ciudadano, porque para la UdeG el reajuste fue de 369 millones de pesos.
Urgencia no justificada
Los diputados acortaron el tiempo que la Constitución le concede al titular del Ejecutivo para realizar observaciones al Presupuesto de Egresos, para pasar de 8 a sólo 3 días, basándose en el mismo artículo 33 que concede esta posibilidad en caso de que haya urgencia.
Sin embargo, para hacer este ajuste en el tiempo, es necesario que se acredite que existe realmente tal urgencia, y en este caso los diputados no lo hicieron, pues en el debate el diputado Salvador Rizo Castelo argumentó que la urgencia era tener definido el presupuesto porque la fecha límite para su aprobación es el 15 de diciembre.
Esta decisión de acortar el tiempo para hacer observaciones, podría convertirse precisamente en el argumento que utilice el Ejecutivo para regresarlo al Legislativo, aunque en el Gobierno del Estado pareciera que ya no quieren alargar este problema a pesar de que no les autorizaron a contratar un crédito quirografario.
17 diciembre, 2012
