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Gilberto Pérez Castillo
Los candidatos del PAN que fueron derrotadas en las elecciones municipales de Guadalajara, Zapopan, Tlaquepaque y Tonalá no tienen cara como para impugnar los resultados de los comicios de este domingo 5 de julio.
Los candidatos del PAN fueron vencidos a pesar de que:

  • Rebasaron los topes de campaña,
  • Utilizaron las estructuras municipales y del Congreso del Estado en su beneficio electoral,
  • Desviaron recursos públicos para sus precampañas y campañas,
  • Se beneficiaron ilegítimamente de las instituciones del Estado,
  • Echaron mano de la guerra sucia y la difamación, e
  • Hicieron campaña en la etapa que la ley prohibe hacerlo,

Después de haber sido derrotados a pesar de todos los excesos que cometieron, los candidatos del PAN a las alcaldías metropolitanas no tendrían ninguna vergüenza ni legitimidad si entorpecen el proceso de entrega de las administraciones municipales.
Los panistas de Jalisco, y sobre todo los de la zona metropolitana, deberían escuchar y analizar con mucho cuidado el mensaje que los electores les enviaron en las urnas el pasado domingo 5 de julio.
En lugar de tratar de ganar en la mesa lo que no pudieron ganar en las urnas, los panistas deberían asumir la voluntad ciudadana y no agrandar aún más la distancia que ya existe entre ellos y la ciudadanía.