Si alguien tiene un poder de convocatoria entre la clase política de Jalisco es la actual senadora del PRI, Beatriz Paredes Rangel, hoy abiertamente aspirante a la candidatura a la presidencia de la República en el 2024, quien ayer logró reunir a un numeroso auditorio en uno de los salones más amplios de la Expo Guadalajara, a invitación de la agrupación política nacional Confío en México.

Lo mismo estuvieron presentes los priistas Carlos Rivera Aceves, Ramiro Hernández García, Rafael González Pimienta, Raúl Juárez Valencia, Eleazer Ayala Rodríguez, Arturo Zamora Jiménez, Miguel Castro Reynoso, Hugo Contreras, Roberto “Chino” López, Salvador y Oscar Rizo, Ricardo Chávez Pérez, Hortencia Noroña, Leobardo Alcalá, Patricia Retamoza, Trinidad Padilla López y muchos más; que los panistas Diana González, presidenta estatal; Francisco Ramírez Acuña, Antonio Gloria Morales, Fernando Garza, Rodolfo Ocampo, Alfredo Argüelles, Ricardo Martínez y algunos más; así como los perredistas Natalia Juárez, presidenta del partido, Raúl Vargas López, la diputada Verónica Juárez Piña y otros más.

Quizás esta presencia multipartidista tenga que ver con la esperanza que tienen los asistentes de que sobreviva la alianza “Va por México”, pese a la traición del dirigente priista Alejandro Moreno a sus colegas del PAN y PRD, Marko Cortés y Jesús Zambrano, haciendo el “trabajo sucio” a Morena y al gobierno de la cuarta transformación. Pero indudablemente que la tlaxcalteca tiene cartel entre esta clase política que parece añorar los tiempos de la buena política, de la política-política, de la política de altura. Y no es descartable que si Paredes Rangel logra ser candidata presidencial, tendrá los votos de muchos de los ahí presentes, aunque no sean priistas. Faltará saber qué dice el ciudadano común.

Paredes Rangel reconfirmó que es una de las políticas más hechas y consolidadas del país, y que no en vano su confesión de que aspira a la candidatura presidencial fue aplaudida y bien recibida por propios y extraños e, incluso, nadie duda que otros aspirantes como Santiago Creel o Enrique de la Madrid -a quien dice que conoce desde adolescente-, se harían a un lado y le dejarían el camino libre. Creo que por el momento, no hay mejor perfil para una candidatura a la presidencia de la República, que la de Beatriz Paredes por parte de la oposición.

Lo sucedido ayer en el salón México de la Expo Guadalajara, lo evidenció al menos entre la clase política jalisciense.

Aunque todo indica que es cuestión de horas para conocer la “muerte” de la coalición “Va por México”, la senadora priista es de las que “rezan” porque siga con vida o que se integre una nueva alianza, pero no sólo entre los partidos políticos sino además entre otros sectores de la sociedad. Así lo dijo: “Me parece que la alianza es una decisión de sentido común de los demócratas mexicanos. La necesidad de la alianza se presentó al darnos cuenta de que había algunos signos de retroceso democrático (…). Los partidos políticos del país no vamos a permitir el retroceso autoritario. Eso es el eje que motivó la construcción de la alianza”.

Y agregó: “La realidad estratégica es que se necesita un frente nacional opositor que contenga, contemple que invite y que convoque a la sociedad civil. Yo no creo que sea suficiente con los partidos políticos, es indispensable que la sociedad civil participe; es indispensable que las cámaras, los sindicatos, las organizaciones no gubernamentales, que todas las asociaciones participen”.

Sobre si México está preparado para que lo gobierne una mujer, luego de hacer una referencia a la mujer de la casa que se hace cargo de la familia cuando el esposo se va a trabajar a Estados Unidos, señaló: “¡Claro que las mujeres están listas para gobernar! ¡Claro que las mujeres están listas para ejercer la autoridad, con suavidad pero con firmeza! Este país requiere firmeza; este país requiere que se aplique la ley en todas las áreas y todos los niveles. Este país no requiere ni abrazos ni balazos… ¡Requiere la Constitución, requiere la ley, requiere firmeza, y requiere la convicción de que es esencial preservar el futuro de México!”.

Otro de los puntos interesantes de su intervención en el lapso de preguntas y respuestas, fue cuando confesó que “nunca he sido hiperpresidencialista, y si les digo la verdad, nunca he sido presidencialista. A mi me gusta el Poder Legislativo. A mi me gustaría que el Poder Legislativo estuviera robustecido; me gustaría un sistema más semipresidencialista. Me gustaría una reforma profunda del Estado mexicano, para que los secretarios fuesen ministros, para que no tengan que atender barbaridades cuando el presidente de las ordena, y tengan un margen de maniobra y puedan ir a discutir al Congreso.

“Tengo muchos deseos de innovar el modo institucional, sobre la base del federalismo, de un presidencialismo acotado, de mayor fuerza en el Poder Legislativo, y de una Suprema Corte verdaderamente independiente y apegada siempre a Derecho”.

Así, Beatriz Paredes dio pinceladas de lo que pudiera ser su proyecto de gobierno en caso de ser, primero, candidata a la presidencia y, posteriormente, la nueva inquilina de Palacio Nacional. Pero falta lo más importante: que logre ser la candidata.

Al tiempo…