El fin de semana Claudia Sheinbaum Pardo fue ungida oficialmente candidata de la coalición Sigamos Haciendo Historia a la presidencia de la República. Dejó atrás los motes de coordinadora nacional de los Comités para la Defensa de la Cuarta Transformación y precandidata presidencial. Resta ahora sólo esperar el arranque formal y oficial de la campaña a partir del primero de marzo. Mientras tanto, quizás la tarea que estará realizando será hacer los “ajustes” necesarios, “apretar las tuercas” obligadas en las nueve entidades donde habrá elección de gobernador -Jalisco entre ellas- y en el resto de país para llevar a la realidad el llamado que ha hecho desde que fue declarada ganadora de aquella famosa encuesta: a la unidad.

Y si en alguna entidad tendrá que hacer “talacha” para que eso suceda es aquí en Jalisco, donde sigue reinando la división entre los mismos morenistas, pero también entre los morenistas y demás militantes de los partidos que aquí conforman la coalición, particularmente con el Verde Ecologista y con Futuro Jalisco. La relación con el Partido del Trabajo y Hagamos Jalisco ha sido más tersa, menos complicada.

Morena designó hace poco a los integrantes del equipo que habrá de trabajar a favor de las dos Claudias -Sheinbaum y Delgadillo-, encabezado por Merylin Gómez Pozos como la coordinadora general de campaña de la ex jefa de gobierno de la Ciudad de México, mientras el Partido Verde Ecologista envió a Jalisco a Felipe Delgado Carrillo -hermano de Mario, dirigente nacional de Morena- como su delegado especial -sin ser encargado de la presidencia estatal, porque sigue en funciones Luis Munguía-.

Sin embargo, no obstante los nombramientos emitidos desde la Ciudad de México y los “autonombramientos” con que se presentan muchos otros “ofrecidos” o quienes tienen un nombramiento oficial en el comité estatal o los diversos espacios creados para reforzar las campañas a la presidencia de la República y a la gubernatura, hay que tener registro que a diferencia de López Obrador en el 2012 y en el 2018 y ahora de Xóchitl Gálvez, la virtual candidata presidencial de la coalición Fuerza y Corazón por México, Claudia Sheinbaum personalmente ha hecho marcaje personal a Jalisco.

Ha reserva de que se nos escape alguna visita y sin contar las dos que hizo como jefa de Gobierno a Centros Universitarios de la UdeG, Sheinbaum Pardo ha estado en Jalisco como coordinadora-precandidata en ¡ocho ocasiones!: En la explanada del Cultural Cabañas (Guadalajara); en un encuentro privado que sostuvo en el Centro de Eventos Palcco (Zapopan); en la arena VFG (Tlajomulco de Zúñiga); en el Palenque de las Fiestas de Octubre (Zapopan); en Ocotlán; en Tonalá; en Atotonilco en un encuentro con agroproductores del país; en El Salto; y en la explanada del Convento de Las Capcuchinas, en Lagos de Moreno.

¿A qué obedecen estas continúas visitas de Claudia Sheinbaum a Jalisco? ¿Únicamente a buscar los votos de los jaliscienses que la lleven a la presidencia de la República? Recordemos que los últimos cuatro presidentes -Vicente Fox, Felipe Calderón, Enrique Peña y Andrés Manuel López- han ganado su elección en Jalisco. Mario Delgado aseguró que en la elección del dos de julio iban por 35 millones de votos en el país, casi cinco millones más que con los que ganó AMLO en el 2018 (30 millones 113 mil). ¿Logrará la candidata obtener casi el millón y medio -más o menos- de votos en Jalisco que han obtenido los ganadores anteriores? ¿O en esa meta que se ha marcado está darle también el triunfo a Claudia Delgadillo por la gubernatura? Fox y Carderón se la dieron a Francisco Ramírez Acuña y Emilio González Márquez, respectivamente; Peña se la dio al finado Aristóteles Sandoval, pero López Obrador no pudo dársela a Carlos Lomelí Bolaños.

Para nadie es desconocido que en varias de sus visitas, Sheinbaum ha dado “jalones de oreja”, como ella misma lo ha dicho; ha “ajustado” y “apretado” tuercas; ha hecho movimiento en los equipos, y ha convocado -en público y en privado- a la unidad de la coalición en Jalisco. ¿Logrará tener la maquinaria bien aceitada y lista en Jalisco para el arranque de la campaña, que la lleve no sólo a ganar Jalisco sino darle la gubernatura a la coalición morenista?

Los “morenos”, así como propios y extraños, reconocen que la marca “Morena” se ha posesionado muy bien en Jalisco, falta confirmar si los militantes de los partido que integran la coalición Sigamos Haciendo Historia, logran superar el síndrome que ha caracterizado por décadas a los políticos jaliscienses de todos los partidos: el del “cangrejo”.

Al tiempo…