Por Julio César Hernández

Caprichosos los priístas, se aferraron a su postura de que deberían ser siete, y no cinco ni tres, los consejeros integrantes del Instituto de Transparencia, por lo que tuvo que ser con la mínima votación requerida (27 votos) que se aprobara la reforma de disminuir el número de consejeros de este organismo.

De cinco que son actualmente, pasó a tres, como decidieron los diputados de las cinco, de las seis fracciones parlamentarias en el Congreso del Estado.

“En el caso de que triunfe esta postura reduccionista, lo hará con una reforma de panzaso, porque solamente obtendrán 27 votos, una reforma que no va a ser unánime ni por consenso…”, nos dijo el lunes pasado el diputado Gerardo Rodríguez, al participar en el programa radiofónico “Temas de Cámara” (1070 Radio Noticias), donde se abordó el tema sobre el número de consejeros que deberían de integrar el Instituto de Transparencia.

Las cinco fracciones legislativas sumaron los 27 votos necesarios para modificar la integración del Instituto y reducir el número de consejeros, con lo que de alguna manera no sólo se ahorrarán recursos económicos al no tener que pagarle 1.5 millón a cada uno de los siete consejeros si hubiese pasado la propuesta del PRI, sino que la operatividad del organismo será mucho mejor.

¿Por qué los priístas se aferraron a su postura de aumentar el número de consejeros en el ITEI? Esta es la explicación que dio el diputado Gerardo Rodríguez: “En la fracción hay consenso de apoyar la postura de promover a siete consejeros del ITEI, en virtud de la magnitud del Estado de Jalisco, de los órganos sujetos a revisión, que son bastante significativos e importantes. Tenemos órganos muy importantes como la Universidad de Guadalajara y otros órganos que requieren de rendición de cuentas.

“En virtud de que es un estado grande, es que se requiere un Instituto con capacidad de revisión, de evaluación, y nosotros consideramos que en función del tamaño, requiere más consejeros”.

Pero los priístas nunca convencieron con sus argumentos del por qué siete consejeros y no tres, cinco, siete, nueve once o cualquier otro número.

Simplemente ellos consideraron que siete consejeros cubrían la carga de trabajo que demanda, en materia de transparencia, un estado como Jalisco.

“No es posible que una estructura burocrática de las dimensiones de Jalisco, sea supervisado por tres individuos; consideramos que es un despropósito, y quienes apuestan a que sean tres, tienen una visión reduccionista de la rendición de cuentas”, remató Gerardo Rodríguez.

Ante los argumento utilizados por los priístas en este asunto, todo nos lleva a concluir que fue un capricho la postura no sólo de sostener al actual número de consejeros, cinco, sino de incrementarlo a siete.

Y no dudemos que quizás no anden muy equivocados quienes deslizaban que los priístas querían “negociar” otras cosas a cambio de apoyar la postura del PAN, PRD, PT, PANAL y el PVEM.