Gilberto Pérez Castillo

Emilio González Márquez, el gobernador electo de Jalisco, tiene la tarea de crear un gabinete para gobernar el estado los próximos seis años. Y contrario a lo que muchos puedan creer, esa no es una tarea fácil, si consideramos los factores y las presiones que confluyen alrededor de quien gana una elección de gobernador a la hora de integrar su equipo de gobierno.

Los aspirantes son muchos, pero los espacios son pocos. Pero en la mayoría de las veces se acaba escogiendo no a los más aptos, por las presiones que se dan a la hora de tomar las decisiones.

Para empezar, Emilio debe designar a los titulares a ocupar las 19 principales carteras que conforman el Poder Ejecutivo: Secretaría General de Gobierno, Secretaría de Finanzas, Secretaría de Desarrollo Urbano, Secretaría de Desarrollo Rural, Secretaría de Promoción Económica, Secretaría de Turismo, Secretaría de Educación, Secretaría de Cultura, Secretaría de Salud, Secretaría de Vialidad y Transporte, Secretaría de Administración, Secretaría de Seguridad Pública, Prevención y Readaptación Social, Secretaría de Medio Ambiente para el Desarrollo Sustentable, Contraloría del Estado, Procuraduría de Desarrollo Urbano, Secretaría del Trabajo y Previsión Social, Secretaría de Desarrollo Humano, y Procuraduría General de Justicia.

Luego debe revisar, con quienes designe titulares de esas secretarías y procuradurías, los nombramientos de los respectivos subsecretarios y sub procuradores, así como los de los directores más importantes de cada dependencia.

Enseguida debe decidir quienes serán los responsable de algunos organismos auxiliares del Ejecutivo, como el Departamento de Relaciones Públicas, Departamento de Comunicación Social, Secretariado Técnico, Secretaría Particular, Secretaría Privada, Ayudantía, y la Unidad de Atención Ciudadana y Audiencia Pública.

También debe buscar responsables para otras dependencias importantes de su responsabilidad, como en los casos del Sistecozome, Siapa, Seapal, Ceas, Coordinación de Asesores y otros.

Pero para el reclutamiento de tantos funcionarios del primer nivel del que será su gobierno, Emilio González tendrá diferentes fuentes del que brotarán propuestas y más propuestas. También recibirá muchas presiones para influir en su decisión final.

Éstos son los círculos de donde saldrán los que serán finalmente designados integrantes del primer nivel del gobierno de Emilio González.

El círculo cercano. Este grupo está conformado por el equipo político ligado e identificado fuertemente con el gobernador electo. Son los hombres y las mujeres de su confianza política y que lo han acompañado en las tareas más importantes de su carrera política, como fue durante su paso por la dirigencia estatal del PAN, la Alcaldía de Guadalajara, la precampaña y la campaña de Gobernador. Tal vez sea el grupo de donde saldrán los titulares de las secretarías claves de la administración.

Los funcionarios del Ayuntamiento. Cuando llegó a la Alcaldía de Guadalajara, Emilio González también tuvo que conformar un equipo de gobierno de diferentes orígenes. La mayoría de quienes lo acompañaron en la administración municipal esperan ser llamados al gobierno estatal. Algunos de ellos darán el salto, pero no habrá lugar para todos.

Los recomendados del Poder. Son muchos los círculos de poder que deben estar enviándole, o le enviarán, a Emilio González recomendados para que sean considerados a la hora de construir el gabinete. Dirigentes nacionales y estatales del PAN, secretarios y sub secretarios de Estado de la administración de Fox y del gobierno federal entrante, senadores, diputados federales y locales, gobernadores panistas, ex gobernadores, grandes empresarios, dueños o directivos de medios de comunicación, líderes religiosos, líderes sindicales poderosos, entre otros, deben estar tratando de influir en el gobernador electo para acomodar a sus recomendados.

Los aliados incómodos. Cuando un político busca ganar una elección, ya sea interna o constitucional, se ve obligado a realizar todo tipo de alianzas electorales, muchas veces con personajes o grupos que no le son del todo gratos, pero que le pueden aportar votos. Estos aliados, por supuesto, buscan ser recompensados a la hora del reparto del pastel gubernamental y habrá que gratificar sus aportaciones al triunfo. Entre estos estarían políticos o grupos políticos del propio PAN y de otros partidos que, sin ser afines, se la jugaron con Emilio.

Los representantes del dinero. En tres años Emilio González ha tenido que ganar cuatro elecciones, dos internas y dos constitucionales; y para ganarlas necesitó una gran cantidad de dinero. Muchos millones de pesos. Y aunque los políticos lo nieguen, ese dinero genera compromisos, algunos de los cuales se reflejan en la integración de recomendados de los grandes aportadores de fondos para las campañas a los equipos de gobierno.

El Círculo Familiar y Personal. Emilio González ya tuvo a varios de sus cuñados trabajando en el Ayuntamiento de Guadalajara, lo que indica que sí es proclive a considerar a su familia a la hora de integrar su equipo de gobierno. De esta manera, habrá que considerar que, aunque ya no sean familiares directos los que sean llamados al gobierno en esta ocasión, sí podrían salir del círculo familiar algunas recomendaciones para el gabinete. En este grupo también deben considerarse los amigos cercanos del gobernante.

Los externos. En la mayoría de los casos, durante sus campañas o después de ellas, quienes llegan a gobernar conocen a personajes que les demuestran tener las capacidades y cualidades como para ser llamados al trabajo en el gobierno. Sin ser panistas, sin haber hecho campaña y sin ser parte del grupo, algunos de ellos serán llamados al gobierno. *Publicado en el Semanario Crítica el 18 de Septiembre de 2006.