Mientras la agenda del gobernador Enrique Alfaro Ramírez para el día de hoy registra su partición en la reunión que la CONAGO sostendrá con el gabinete de Seguridad federal y posteriormente “acudirá, junto a los gobernadores, a una reunión con el Presidente, Andrés Manuel López Obrador, en Palacio Nacional, en la agenda del Mandatario federal sólo se consigna la rueda de prensa “mañanera”, pero no su encuentro con los gobernadores.

Sin embargo, desde la semana pasada tanto Alfaro Ramírez como los gobernadores del PAN revelaron que sostendrían una reunión con López Obrador y que el tema a tratar sería sobre el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), que reemplaza al Seguro Popular y con el que los mandatarios panistas y el emecista no están de acuerdo.

Esta es la primera reunión del año de la CONAGO y de Enrique Alfaro con el Presidente de la República, y hoy puede ser un día clave para el futuro de Jalisco y los jaliscienses en dos temas fundamentales y trascendentes, donde el gobierno emecista ha quedado mucho a deber: seguridad pública y salud.

Y esta visita de Alfaro a la capital del país está enmarcada en dos recriminaciones que hizo al gobierno lópezobradorista: 1. Acusó al subsecretario de Gobernación, Alejandro Encinas, de haber sido enviado para atacar políticamente a su gobierno, luego de que el funcionario federal reveló las cifras de desaparecidos en el país donde Jalisco aparece en primer lugar. “Con el tema de los desaparecidos no se juega a la política, si alguien lo mandó a atacar al gobierno de Jalisco con sus cifras, se está equivocando”, dijo el mandatario estatal.

¿Quién puede mandar a Encinas a “atacar al gobierno de Jalisco”? Sólo hay dos personas que lo pueden hacer: su jefe inmediato, Olga Cordero, secretaria de Gobernación, o el mismo presidente Andrés Manuel López Obrador. ¿En quién de los dos pensó Alfaro cuando hizo dicho señalamiento?

2. Criticó al Insabi, el programa de López Obrador en materia de salud al que le auguró el fracaso. El sábado pasado dijo a los reporteros: “Hay poca claridad y pocas definiciones respecto a la manera en cómo los Estados que hemos decidido no caminar en esta ruta, que nos parece que está condenada al fracaso, vamos a trabajar y cómo será la coordinación con la nación”.

Alfaro Ramírez, pues, busca proyectar su postura de oposición al presidente López Obrador para mantenerse así en la palestra nacional y continuar trabajando una imagen que le sume simpatías en el país con miras a lo que vendrá en 2024, pero en ese afán tendrá que ser muy cuidadoso para no seguir llevándose al estado “entre las patas”, y mucho menos en esos dos trascendentales temas: seguridad y salud.

Por eso es de vital importancia lo que logre rescatar en estos dos rubros, primero, en la reunión de la Conago y, segundo, en su encuentro con el presidente Andrés Manuel. De lo que suceda, sin duda, dependerá gran parte de lo que le espera a Jalisco en ambos temas durante los próximos meses.

¿Cuáles son sus apuestas? Al tiempo.