En Casa Jalisco quieren pelear. O al menos, no envían un gesto de ser buenos anfitriones…

Y es que a unas horas de que el gobernador Enrique Alfaro Ramírez reciba en Palacio de Gobierno al rector general de la Universidad de Guadalajara, Ricardo Villanueva Lomelí, y a una comisión de universitarios para hablar sobre los disputados 140 millones de pesos que ya estaban comprometidos para el Museo de Ciencias Ambientales, pero que extrañamente el primero decidió reorientarlos a la construcción del Hospital Civil de Oriente, los diputados de su partido -como instrumentos al gusto del Ejecutivo-, se encargaron de “echarle gasolina al fuego” con dos propuestas cuyo objetivo no es limar asperezas con la UdeG.

Por un lado, la diputada y presidenta del partido Movimiento Ciudadano, Mirza Flores Gómez, anunció que entre las reformas propuestas a ser aprobadas, ya, está que el titular de la Contraloría de la Universidad ya no sea designado por el Consejo General Universitario sino por el Congreso del Estado; por el otro, el legislador emecista Daniel Robles -el mismo que propuso la reasignación de los 140 millones de pesos- presentó una solicitud para que la Auditoría Superior del Estado revise cómo ha gastado la UdeG los recursos que ya le han otorgado para dicho Museo de Ciencias, pues sospecha de que no lo han hecho bien.

Obvio que ambas propuestas -la de Flores y Robles- no fueron por iniciativa propia, pues han demostrado ser empleados y estar al servicio de lo que diga su jefe político, el gobernador del Estado. Ese diputado Robles ha resultado todo un “genio” y estoy seguro que no es de las simpatías de los universitarios.

Por supuesto que con estas dos propuestas de los diputados emecistas, no se genera el mejor ambiente para un buen diálogo entre el gobierno del Estado y la Universidad de Guadalajara, pero no hay duda de que este fue el ambiente que desde Casa Jalisco se quiso crear para el encuentro que está programado a llevarse a cabo, a puerta cerrada, para alrededor de las diez de la mañana y sin que se conozca que haya límite de tiempo.

¿Qué resultados podemos esperar de la reunión Alfaro-Villanueva -otrora rivales por la alcaldía de Guadalajara en 2015-? Si de por sí inicialmente era poco optimista, ahora con estas dos propuestas de los legisladores no hay duda que los “tambores de guerra” tocan desde la sede oficial del gobierno y el mensaje es que el Ejecutivo se mantendrá en su posición de no entregar esos 140 millones de pesos para el Museo y destinarlos al Hospital Civil, mientras que Villanueva Lomelí y los universitarios no cederán y exigirán se respete la autonomía universitaria y el destino inicial de los disputados recursos.

De ser así -no hay razones para creer que será de otra manera-, entonces ambas partes se retirarán para alistar las “armas” con las que emprenderán el siguiente capítulo de esta guerra que inicialmente se creyó que no pasaba de ser un diferendo momentáneo, pero que ahora toma otro rostro de un camino sin retorno, y al que se han “montado” los adversarios del verdadero destinatario del “golpe” gubernamental, el “Licenciado” Raúl Padilla López, y quienes en los últimos días han difundido en redes sociales una gran cantidad de videos en su contra, exigiendo deje de controlar la vida universitaria.

Sin duda, pues, los ojos de propios y extraños estarán puestos en este encuentro y lo que resulte de él, pero principalmente estarán atentos a lo que venga después porque, reitero, no hay señales de que alguna de las partes ceda a su postura, pues de lo que se trata también es de medir fuerzas y comprobar hasta dónde uno y otro resiste la presión del adversario. Y conociendo tanto a Alfaro como a Padilla, ninguno querrá mandar la imagen que fueron derrotados.

Y si no, al tiempo…