Gilberto Pérez Castillo
¿Se vale que un gobierno juegue con la Educación de los niños y adolescentes por un simple interés político o de grilla?
Si la respuesta es Sí, entonces todos los jaliscienses debemos aceptar sin más el nombramiento de Antonio Gloria Morales como nuevo Secretario de Educación en Jalisco.
Pero si la respuesta es No, habría que elevar y sostener nuestra inconformidad hasta que este grave error se corrija.
El Gobernador Emilio González Márquez envío a Antonio Gloria a Educación con el simple objetivo de empujarlo para que pueda competir por la candidatura del PAN a la Presidencia Municipal de Zapopan o Guadalajara, y no por un interés en la educación de las presentes y futuras generaciones.
En un país y un estado donde recurrentemente las evaluaciones reprueban a nuestros niños, la Secretaría de Educación no debería seguirse manejando como hasta ahora se ha hecho: como un simple espacio para políticos y grillos.
Por eso resulta demasiado grave que en lugar de buscar a la persona adecuada para encabezar los esfuerzos de mejorar la educación en Jalisco, se le asigne la Secretaría a alguien que no está ni estará interesado en mejorar la calidad de la educación en el Estado, sino simple y sencillamente en usar el cargo de trampolín para buscar una Candidatura.
El nombramiento de Antonio Gloria como Secretario de Educación es un grave error que se debe corregir porque ya no se puede seguir jugando con el futuro de nuestros niños.
14 enero, 2010