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Julio César Hernández
A menos de 24 horas de que inicie la sesión del Consejo Estatal en la que será elegido el nuevo dirigente del Partido Acción Nacional, en el equipo del senador Héctor Pérez Plazola brilla el optimismo y la confianza de que serán los ganadores de esta contienda.
Aseguran que de acuerdo a sus cuentas, ya tienen más de la mitad de los votos necesarios para levantarse con la victoria, luego de que varios consejeros que se creía estaban comprometidos a favor de su adversario, Hernán Cortés Berumen, le han manifestado no sólo su apoyo sino prometido su voto.
Valga decir que en la imaginaria, en teoría, Hernán Cortés llegará a la sesión como el favorito, toda vez que la corriente política en el PAN a la que pertenece -la “paquista-rosalista”-, tiene mayoría de consejeros y a eso le apuestan. Sin embargo, los “plazolistas” -grupo en el que están los “emilistas-tayloristas”- aseguran que a lo largo de estos días de campaña interna han logrado sumar a su favor a varios de esos consejeros, en número suficiente para inclinar la balanza a su favor.
Y esto se da enmedio de mutuas acusaciones de presión hacia los consejeros. Por el lado de los “emilistas-tayloristas”, denuncian que los de enfrente no sólo presionan sino que ofrecen dinero a los consejeros para asegurar su voto a favor de Cortés Berumen, mientras que los “paquistas-rosalistas” acusan a los adversarios de echar a andar la nómina para conseguir los votos.
Y, en este sentido, corre la versión de que los “emilistas” ofrecen cuatro espacios laborables a cambio de un voto, oferta tentadora para cualquiera, pues se añade que el salario mínimo a pagar sería de 40 mil pesos. Si lo anterior es cierto, ¿cuántos consejeros caerán en la tentación?