Por Gilberto Pérez Castillo

La Zona Metropolitana tiene urgencia de un reordenamiento de la Movilidad, mismo que deberá privilegiar al Transporte Público por encima del automóvil, pero a los responsables de los proyectos y de las acciones de Gobierno no les corren las prisas.

La ciudad ya no aguanta más plazos para emprender acciones que reviertan la tendencia equivocada que hasta ahora ha seguido el Gobierno Estatal, que sólo invierte en infraestructura para beneficio de los automóviles y nada para el mejoramiento del Transporte Público o para el uso de medio alternativos, como la Bicicleta.

Pero mientras la ciudad se convierte en un embotellamiento diario y alcanza los más altos niveles de contaminación, Tomás López Miranda, el responsable de la Mesa de Movilidad de la Gran Alianza por Jalisco, se la pasa en la grilla y buscándose más cargos.

Durante los últimos meses López Miranda se la pasó haciéndole la vida imposible a Eduardo Orendain Giovanini para que éste dejara la Presidencia del Consejo Económico y Social del Estado de Jalisco (Cesjal), chamba que quería para sí el también responsable de la Mesa de Movilidad.

Como se sabe, la lucha por la Presidencia del Cesjal acabó con Tomás López Miranda en la Presidencia, y mientras tanto la Mesa de Movilidad de la Gran Alianza está esperando a que su coordinador le dedique un poco de tiempo.

Luego se sorprenden porque la ciudadanía exige más celeridad a las soluciones de la Movilidad en la zona metropolitana.