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Gilberto Pérez Castillo
Al viejo estilo dinosaúrico el Delegado del Comité Directivo Nacional (CEN) del PRI Raúl Mejía ha venido simulando una supuesta consulta a los priistas para tratar de justificar el albazo que intentarán dar este jueves para imponer a Rafael González Pimienta como presidente interino del PRI para concluir el período estatutario que vence hasta diciembre del 2011.
La estrategia de Mejía ha sido la de reunirse con dirigentes de sectores y grupos priistas con el argumento de “la señora (Beatriz Paredes) me pidió que te buscara personalmente para pedirte que apoyes la elección de Rafael González Pimienta como presidente interino” para luego agregar que fulano. sutano y mengano ya están de acuerdo.
Ante esta simulación de consulta, en la que no se abre la puerta para otras opciones ni para el debate, el senador Raúl Mejía ha ido, según él, concertando una designación que genera más inconformidades cada hora que pasa y que augura una sesión del Consejo Político Estatal muy acalorada.
El problema para muchos priistas es que consideran que ni la forma ni la persona (Rafael González Pimienta) son las adecuadas para resolver en estos momentos quién deba conducir a la dirigencia estatal del PRI en el estado.