En tiempos de Eduardo Rosales Castellanos al frente de la dirigencia estatal del PAN, Héctor Álvarez Contreras -cuando fungía primero como alcalde de Zapotlanejo y posteriormente como candidato a diputado local-, declaraba que ninguna sanción podía aplicarle el partido por sus rebeldías porque no era militante del mismo.
Y es que ya para entonces el ahora legislador se caracterizaba por sus fuertes declaraciones y críticas para con los suyos, principalmente cuando se manejó que postuló y promovió para ser sucedido en el cargo municipal por el entonces candidato del Partido Verde Ecologista, que a la sazón se convirtió en el presidente municipal de Zapotlanejo.
Álvarez Contreras se ha caracterizado por ser “entrón”, crítico hasta de sus propios compañeros de partido, ya no se diga de sus adversarios políticos, lanza “dardos” hacia todo aquello que se mueve y levantó ámpula cuando puso a disposición de la ciudadanía un teléfono a través del cual se podían denunciar a funcionarios presuntamente corruptos y “aviadores”, revelando los nombres denunciados sin preocuparse lo más mínimo por confirmar que fuera cierto.
Bueno, pues resulta que a partir del pasado cinco de enero de este año, el diputado Héctor Álvarez ya no podía alegar que el PAN nada podía hacer en su contra, porque desde ese día se convirtió en militante activo con el registro AACH590922HMNLNCOO.
Y con éste carácter, es que el PAN que primero lo postuló para presidente municipal de Zapotlanejo y luego a la diputación local, le ha abierto ahora un proceso de expulsión por la conducta guardada hacia su partido, sus dirigentes y sus compañeros militantes.
Fue el propio Álvarez Contreras quien reveló que el viernes fue notificado que se le abría proceso de expulsión.
Y, obvio, hoy Héctor Álvarez asegura que pretenden expulsarlo del PAN por “bocón”. Sin embargo, dijo que se defenderá de las imputaciones y para ello ya tiene abogados que llevarán su caso.
Si nos atenemos a los antecedentes de otras expulsiones, la verdad creemos que son pocas las posibilidades que tiene el legislador de salvarse de la expulsión, pues por menos de lo que ha hecho y con una trayectoria panista mayor a la que él tiene, fueron expulsados en su momentos Manuel Castelazo y Cirano Padilla.
Así es que de confirmarse los pronósticos, habrá que esperar qué partido decide llevarse a sus filas a un hombre que, dicen, es bastante incómodo para cualquiera.
¿Será?