Conforme avancen los días y se acerca la fecha en la que el pleno del Congreso del Estado abordará la iniciativa de la Ley de Libre Convivencia, promovida por el diputado Enrique Velázquez González -si es que no se “congela” en el camino-, los ánimos comienzan a “calentarse” con pronóstico reservado lo que suceda el día que se agende para su discusión.
Podemos decir que la decisión que “encendió la mecha” del debate fue cuando los diputados del PRI, miembros mayoritarios de la Comisión de Desarrollo Humano, rechazaron el dictamen del diputado del PAN; Alberto Esquer, que era en contra de dicha iniciativa, por lo que inmediatamente presentaron el dictamen a favor del Órgano Técnico de la misma comisión y fue aprobado.
En la Comisión de Puntos Constitucionales -con mayoría panista-, la diputada Norma Cordero , quien inicialmente dictaminaría esta iniciativa, se excusó de ello y solicitó que fuera el Órgano Técnico de la Comisión el que lo hiciera.
Restan por dictaminar esta polémica iniciativa las comisiones de Derechos Humanos y de Equidad de Género.
A través de las redes sociales han circulado ya posiciones en contra de esta iniciativa, algunas con argumentos y otras con simples descalificaciones. A esto hay que añadirle la manifestación que hoy hizo casi una veintena de jóvenes a las afueras del Palacio Legislativo también en contra.
Y sin duda que conforme pase el tiempo, el ambiente en torno a esta iniciativa comenzará a incrementarse lo que, sin duda, colocará en una encrucijada a aquellos diputados que aun no tienen definida su postura al respecto por diversas razones, particularmente a quienes miden los efectos políticos en caso de votar a favor.
Así, hasta el momento podemos asegurar que los diputados que ya tienen definido su voto a favor de la Ley de Libre Convivencia son los perredistas Celia Fausto y Enrique Velázquez; el panista Juan José Cuevas; y el diputado independiente Ricardo Rodríguez.
En contra se asegura que está el resto de la fracción legislativa del PAN.
Sin que haya algún pronunciamiento público a favor de manera personal, se presume que los siete diputados del PRI que suscribieron la iniciativa al diputado Velázquez González emitirían su voto a favor.
El resto de los legisladores priistas ha sido cauto, prudente y evitado hacer algún pronunciamiento a favor o en contra de manera pública, aunque su coordinador Miguel Castro Reynoso ha dicho que el sentido de su voto será en el marco de lo que marca la naturaleza humana, por lo que presumo que será en contra.
Lo más deseable es que en tanto la iniciativa llega al pleno, el debate que se dé en su entorno sea de altura, de buen nivel, sin descalificativos o calificativos peyorativos; sin embargo, eso es difícil de satisfacer, lo sabemos.
Pero en todo este marco de discusión, habrá que estar muy al pendiente de la postura pública que manifieste el clero jalisciense ante la, ahora sí, inminente discusión de esta iniciativa si se mantiene el ritmo actual y comienzan a dictaminarla las comisiones legislativas que faltan.
Porque sin duda que directa o indirectamente el clero hará manifiesta su oposición a dicha iniciativa y, como lo aceptara el diputado Castro Reynoso, su postura “pesará” en la decisión que tomen los legisladores.
Mientras tanto, al pendiente del debate público…