“Engallados” ante el reto lanzado por el presidente Andrés Manuel López Obrador de que primero consultaran a sus gobernados sobre si estaban de acuerdo o no en que sus entidades se salgan del Pacto Federal, los gobernadores de la Alianza Federalista recularon y le pidieron dejar a un lado este tema para mejor discutir lo que tiene que ver con el Presupuesto 2021 y, en particular, el llamado gasto federalizado.

Pero no sólo eso, sino que ahora le lanzan un “guiño” al resto de los gobernadores del país, incluidos los de Morena, para que se sumen a sus propuestas con la esperanza de que de esta manera López Obrador les haga caso, los voltee a ver y tome en cuenta su postura.

Así lo manifiestan en una carta abierta dirigida al presidente de la República y difundida ayer, que firman los 10 gobernadores rebeldes de la Alianza y a la que curiosamente no se sumaron los otros cuatro mandatarios estatales panistas de Baja California, Querétaro, Yucatán y Quintana Roo, que como integrantes de la Asociación de Gobernadores de Acción Nacional (GOAN), supuestamente se habían sumado a la Alianza Federalista, según lo difundieron ellos mismos el domingo pasado vía Twitter.

La Alianza Federalista ha sido más un fenómeno mediático y de redes sociales que un canal efectivo para que los gobernadores que la integran logren sus objetivos ante el gobierno federal y, particularmente, el presidente López Obrador, quien ha demostrado que “ni los ve ni los oye”. Y que cuando les responde, sólo es para darles “atole con el dedo”.

Estos gobernadores llevan desde el tres de agosto solicitándole al presidente una cita, que los reciba y los escuche, y es fecha que no logran su objetivo, no obstante las declaraciones de Andrés Manuel de que no tiene ningún inconveniente de platicar con ellos. Pero les aplica aquello de que “les dice que sí, pero no les dice cuándo”.

Hace algunos días, envalentonados, estos gobernadores rebeldes amenazaron con salirse del Pacto Federal, pero al ver el alcance de sus declaraciones -que fueron reprobadas por especialistas que les hicieron ver que no es sólo cuestión de querer y que difícilmente lo lograrían-, matizaron su postura y aseguraron que ellos se referían al Pacto Fiscal.

Y no obstante que respondieron rápido al “buscapiés” que les lanzó López Obrador sobre la famosa consulta que algunos de ellos la aplicaron vía fast track por Twitter, donde el 80% de los hidrocálidos dijo estar de acuerdo y en el mismo sentido el 88% de los guanajuatenses y el 87% de los regiomontanos, mientras aquí Enrique Alfaro la aplicó experimentalmente a mano alzada con 200 ganaderos, hoy deciden que ese tema no es prioritario.

“Proponemos que pospongamos unos días la discusión y el debate sobre el Sistema de Coordinación Fiscal y nos concentremos en este momento en el presupuesto 2021, donde nuestra posición es que ningún estado del país puede recibir menos recursos en términos reales que en el año 2020. Así de claro” (negritas original), le dicen a López Obrador en su carta, y plantean cuatro acciones que, dicen, “es una propuesta que invitamos a suscribir a todas las entidades federativas del país. (negritas original).

Desde que se creó esta Alianza Federalista ha dado “palos de ciego”. Un día amenazan con salirse del Pacto Federal y otro solamente del Pacto Fiscal; un día “revientan” contra López Obrador y al día siguiente aclaran que no quieren pelear ni enfrentarse con el gobierno federal. Y así andan, sin rumbo, sin concretar con solidez una propuesta seria que merezca ser atendida en Palacio Nacional, donde los “moditos” alfaristas no son bien vistos.

El domingo pasado el gobernador de Querétaro, Francisco Domínguez, les dio un fuerte “jalón de orejas” a los gobernadores rebeldes y les dijo en redes sociales que la política debe hacerse en la mesa y no con peleas. Y sin mencionarlo por su nombre, fue contundente en su indirecta al gobernador jalisciense Enrique Alfaro Ramírez, cuando dijo:

“Yo creo que tenemos que, en vez de estar grabando videos y debatiendo a través de éstos, sentarnos a la mesa con el gobierno federal; yo creo que los estilos de pedir estas reuniones no han sido las adecuadas (por la Alianza Federalista)”.

Así, pues, habrá que esperar la respuesta del resto de los Mandatarios estatales que no forman parte de la Alianza y, particularmente, los morenistas, pero desde ahora puedo apostar que López Obrador no sólo seguirá sin atenderlos sino que no accederá a las propuestas que le plantean en esta carta.

Y si no, al tiempo…