Azuzado por el presidente Andrés Manuel López Obrador -al igual que los nueve gobernadores más de la Alianza Federalista- para que consulte a los jaliscienses si desean romper con el Pacto Federal, el gobernador Enrique Alfaro declaró ante los reporteros:

“En Jalisco le tomamos la palabra. En Jalisco vamos a iniciar, a partir de este momento, la ruta para hacer una consulta a los ciudadanos de Jalisco para ver si están de acuerdo en que nuestro estado permanezca en esta relación abusiva de la Federación (…). Le vamos a preguntar a los ciudadanos de Jalisco si estamos dispuestos a mantener una relación en la cual Jalisco aporta muchísimo a la Federación y lo que recibe son malos tratos, groserías y desdenes…”.

Minutos después, ante un grupo de ganaderos a quienes les entregó apoyos económicos, Alfaro Ramírez les dijo:

“Vamos a preguntarle al pueblo de Jalisco si estamos dispuestos a seguir pagándole impuestos a la Federación para que ellos se queden con nuestro dinero y no le rindan cuentas a nadie o estamos listos para empezar a discutir cómo le hacemos para nosotros lograr que los impuestos de los jaliscienses se queden en Jalisco…”.

Además de haber “picado el anzuelo” que le lanzó López Obrador ayer en la “mañanera” -al igual que al resto de los gobernadores rebeldes-, la forma en que el gobernador Enrique Alfaro tomó el tema es una vacilada y asumió una actitud muy lópezobradorista de banalizar un asunto que es serio y no es cosa menor, porque hoy hablar de consulta ciudadana es hablar de un tema regulado ya por una ley: la Ley del Sistema de Participación Ciudadana y Popular para la Gobernanza del Estado de Jalisco.

Pero, además, esta consulta no la lleva a cabo a su “contentillo” el gobernador, sino que el artículo 11 de la Constitución del Estado establece que es facultad del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana llevar a cabo “la organización, desarrollo, cómputo y declaración de resultados de los mecanismos de participación ciudadana”. Y aquí es donde es importante escuchar la postura de su presidente, Guillermo Alcaraz Cross.

Por eso también es una vacilada, al estilo lópezobradorista, el “experimento” que llevó a cabo ayer Alfaro con los ganaderos de una votación a mano alzada para “mandarle decir al presidente que aquí en Jalisco no vamos a permitir que la Federación siga abusando de Jalisco, que ¡ya estuvo bueno! (…). No podemos seguir tolerando tanto abuso del gobierno federal. ¡Ya estuvo bueno!”. Y si de vaciladas hablamos, ahí está lo que dijo que le iba a preguntar a los jaliscienses. ¿Ustedes creen que esa es una consulta seria?

Como todos los políticos que declaran de manera impulsiva y sin pensar ni medir sus palabras con tal de ganarse los titulares de los medios de comunicación o “inundar” las redes sociales, el gobernador le dijo a los ganaderos: “Va para adelante la consulta. Y le vamos a preguntar al pueblo de Jalisco si estamos listos para dar la batalla o no”.

Las declaraciones de ayer del gobernador frente a los reporteros y luego ante los ganaderos, se les llama clara y llanamente demagogia. Y una vez más, en ausencia de López Obrador se le deja ir “a la yugular”. Pero Alfaro Ramírez sabe muy bien que no puede hacer ni habrá consulta alguna y, mucho menos, Jalisco se saldrá del Pacto Federal.

Y es que en lugar de asumir con seriedad y responsabilidad el tema del recorte presupuestal para el 2021 y enfrentarlo con una estrategia que garantice si no ganar todo, sí perder lo menos, Alfaro y el resto de gobernadores rebeldes están pensando y actuando electoralmente. Cinco estados de esta Alianza renovarán su gobernatura el año próximo. ¿No creen que los hoy gobernadores quieren llevar “agua a su molino”, ganándole simpatías ciudadanas que se reflejen luego en votos para el candidato de su partido? ¿No creen que con esto, Alfaro se promociona a nivel nacional para el 2024?. En este punto, López Obrador tiene razón.

Para que confirmemos que eso de la consulta es una vacilada, que todo es un show preelectoral y que las declaraciones son demagogia pura, hagamos estas reflexiones:

  1. ¿Cuánto cuesta realizar una consulta ciudadana como lo establece la ley? Jalisco no cuenta con los recursos necesarios para ello, no puede desviar recursos de otras partidas para ese fin, y no hay manera de incluirlo en el presupuesto, Además, ¿esa ciudadanía que será consultada, para empezar, estará de acuerdo en que se gasten millones de pesos en una consulta en lugar de invertirlos en obras o servicios? El artículo 31 señala que en este caso debe ser costeada por el Gobierno del Estado.
  2. ¿A cuantos jaliscienses se debe de consultar para que sea válida, cumpla con la ley y se obtengan los resultados objetivos? El artículo 104 de la Ley de Participación Ciudadana establece que se requiere que “haya participado por lo menos el 33 por ciento de los habitantes de la demarcación territorial…”; o sea, hablamos que se deben de consultar alrededor de 2 millones 500 mil jaliscienses, de los 8 millones 350 mil que somos actualmente.
  3. ¿Qué cantidad de consultados se requiere que lo hayan hecho en el mismo sentido para que se determine el resultado? El mismo artículo 104 señala que debe ser “más de la mitad”; o sea, más de un millón 750 mil habitantes deben decidir si Jalisco abandona o no el Pacto Federal.
  4. En plena pandemia del coronavirus, con muertes y contagios en aumento por esta causa, y con un “botón de emergencia” activado -inicialmente durante 14 días, que podrían alargarse más-, ¿el gobierno sacará a la calle a 2 millones 500 mil habitantes para ser consultadas? ¿Se movilizará por voluntad propia esta cantidad de jaliscienses ante la crisis de Covid-19 que vive Jalisco?
  5. La convocatoria a esta Consulta Ciudadana deberá emitirse 15 días antes de llevarse a cabo, de acuerdo al artículo 101 de la ley mencionada. ¿De qué fechas estamos hablando cuando la pandemia hace estragos en Jalisco? Alfaro aseguró a los reporteros que “vamos a iniciar ya este proceso de consulta”, y a los ganaderos les dijo que “va para adelante la consulta”.
  6. El artículo 100 de dicha ley señala que las solicitudes de consulta popular deben contener, entre otros requisitos, “listado de preguntas, preferentemente bajo la modalidad de preguntas cerradas o de opción múltiple”. O sea, no hay opción para aplicar preguntas con las que el gobernador quiera desahogar su enojo, molestia o rencor en contra de López Obrador o su gobierno, como las que planteó ante los reporteros y ganaderos.
  7. ¿Cómo se pretende llevar a cabo una consulta ciudadana si, para empezar, no hay quién se haga cargo de su procesamiento antes de aplicar la consulta, toda vez que no existe el Consejo de Participación Ciudadana y Popylar para la Gobernanza? Otro engaño más.

Así, pues, llevar a cabo una consulta popular con todas las de la ley, no es “enchílame otra”, por lo que las declaraciones que sobre este tema haga el propio gobernador o algún funcionario público del gobierno o cualquier legislador, no es más que demagogia pura y pretende distraer -al estilo lópezobradorista otra vez-todo la atención de los jaliscienses en asuntos banales, imposibles de efectuar en el momento, dejando de lado asuntos realmente trascendentales para la vida del estado.

Pero aún antes de la consulta, sería bueno que el gobernador Enrique Alfaro le informe a los jaliscienses en general y a los municipios en particular, cómo y de qué manera obtendrá los recursos económicos que se dejen de recibir de la Federación. Esto es lo verdaderamente importante para que los jaliscienses conozcan con veracidad hacía dónde los llevan las ocurrencias del gobernador.

Y aún hay mas. Algunos especialistas advirtieron que el proceso para salirse del Pacto Federal se lleva un tiempo… ¡de cinco a seis años!

¿Entonces qué? ¿De veras creen que va en serio o es pura “chunga” mediática?

Me quedo con lo último… y si no, al tiempo.