Gilberto Pérez Castillo

Este miércoles la Suprema Corte de Justicia acordó atraer el amparo promovido en contra de su destitución por el ex Rector General de la Universidad de Guadalajara, Carlos Briseño Torres.
La atracción del asunto fue promovida por el propio Briseño y paradójicamente la misma podría resultar contraproducente para los fines del propio ex Rector.
Ahora, será la Segunda Sala de la Corte la encargada de resolver el asunto, misma sala que en expedientes anteriores ha resuelto que las universidades públicas no pueden considerarse autoridades en materia de amparo, salvo cuando se trata de la relación de las mismas con sus alumnos inscritos.
Es decir, la Segunda Sala ha rechazado demandas de amparo promovidas por trabajadores o funcionarios de universidades públicas, como es el caso del iniciador por Carlos Briseño, por la simple y sencilla razón que no se pueden considerar autoridades a estas instituciones.
Por eso este recurso promovido por el ex Rector podría resultarle contraproducente para su propia causa.