Insisto en el tema: ¿Para qué un Pacto a fin de cumplir con lo que es obligación de gobernantes y políticos?
¿Por qué un Pacto para cumplir el papel que la ciudadanía les otorgó el pasado dos de julio del 2012: a unos, el de Gobierno; a otros, el de oposición?
Desde sendas trincheras, ambos están obligados a hacer lo correspondiente para lograr el desarrollo, crecimiento y bienestar de todos los jaliscienses.
El gobierno, dentro de su programa de acción -fundado en los principios del partido del que proviene-, ofreció en campaña una serie de acciones que ya en el poder está obligado a cumplir.
Sin embargo, esto no lo exime de escuchar a sus contrarios y a la sociedad misma; esto no lo exime de poner a consideración de los demás sus acciones o programas de gobierno, no para que lo aprueben o no -su obligación es actuar, partiendo de que busca el beneficio de todos-, sino para que los enriquezcan.
Y en el accionar y ejecución de programas y acciones -reitero, partiendo de que busca el bien común-, el resto de la sociedad está obligado a apoyarlo en la medida que le corresponda, pues tampoco es válido que por intereses de grupos, sectores o corrientes, se obstaculicen acciones y programas de beneficio generalizado.
Hoy se habla de un Pacto o Acuerdo por Jalisco y si esto ya es un absurdo -como lo comenté en la entrega anterior-, más lo es que grupos y partidos políticos se peleen por ver quién propone el mejor Pacto o Acuerdo, claro, desde su muy particular punto de vista.
Hoy, a través de un Pacto o Acuerdo se le quiere decir, recordar o subrayar al Poder Legislativo cuál es su obligación: legislar para el beneficio de la mayoría, no de sus partidos. Hoy, a través de un Pacto o Acuerdo, se le quiere decir, recordar o subrayar al Poder Judicial cuál es su obligación:la administración de la justicia para el beneficio de la mayoría, no de sus intereses personales. Hoy a través de un Pacto o Acuerdo se le quiere decir, recordar o subrayar al Poder Ejecutivo cuál es su obligación: Gobernar en beneficio de todos los jaliscienses, no de sus grupos, camarillas o partido.
El titular del Ejecutivo debe partir de que si llegó a esa posición es porque por la vía democrática una mayoría ciudadana le otorgó esa responsabilidad, pero más allá de esa mayoría está obligado a tomar las mejores decisiones en beneficio de todos, con o sin Pacto o Acuerdo.
Los políticos, los partidos, la oposición, debe partir de que si está en esa posición es porque por la vía democrática así lo decidió una mayoría ciudadana, pero más allá de eso, están obligados a aportar lo necesario para el beneficio de todos, con o sin Pacto o Acuerdo.
Claro, su obligación es criticar, observar, señalar aquello que consideren que no está bien o que requiere modificaciones. No darle un “cheque en blanco” al gobernante. Y el Ejecutivo está obligado a escucharlos y actuar en consecuencia, que no quiere decir darles gusto siempre.
Pero lo que no pueden hacer los políticos, partidos y oposición, es obstaculizar el desarrollo, crecimiento y bienestar de todos o de la mayoría, sólo para saciar sus intereses y ambiciones personales o de grupo.
Reitero: con o sin Pacto o Acuerdo.
Es cuestión de voluntad política, responsabilidad y honestidad de nuestros gobernantes y políticos.