Por Hugo Luna
Recibí una llamada telefónica de un actor destacado, perteneciente a un equipo de transición municipal de la zona metropolitana. En relación a mi comentario editorial “Me preocupan los serenos” me replicó que los alcalde electos de Guadalajara, Zapopan, Tlaquepaque y Tonalá siguen firmes en su determinación de no apoyar la construcción de la línea 2 del Macrobús.
En la reunión que sostuvieron los futuros presidentes municipales con el gobernador Emilio González Márquez en Casa Jalisco hace unos días, al procesar el tema del BRT, este les recalcó que la obra se ejecutará con o sin el aval de los municipios, porque es el transporte adecuado para la densidad poblacional de la Zona Metropolitana.
Queda claro que fue una balandronada más del Ejecutivo estatal. Culturalmente pertenece a una generación que no aprendió a construir, mucho menos a incluir y genéticamente está mal dotado para altos vuelos.
Hecho el deslinde, reitero: aunque el discurso político se ha enconado, hay todavía muchos prominentes personajes de la política que actúan con prudencia y sensatez.