Por Julio César Hernández

La apuesta que el Gobierno del Estado ha hecho a las telenovelas o programas de televisión para promover las bellezas naturales de la entidad, bien podría dar “luz” a nuestros diputados para que le tomen la palabra al gobernador Emilio González Márquez y acepten su propuesta de reestructurar los Poderes.

Y es que en esta reestructuración podría estar, por ejemplo, la desaparición de algunas dependencias estatales que ante la efectividad de las telenovelas para atraer turismo e inversiones, se quedaron rezagadas o ya son obsoletas.

¿Para qué nos puede servir, entonces, la Secretaría de Turismo que durante muchos años no fue capaz de atraer turismo al municipio de Tequila como sí lo hizo una telenovela grabada en ese lugar?

Bueno, al menos eso es lo que andan presumiendo nuestras autoridades estatales para justificar la millonaria inversión que harán en la telenovela “Las estúpidas no van al cielo”.

Y si esa es la realidad, es el mejor momento para que nuestros legisladores, insisto, le tomen la palabra al Mandatario estatal.