Luego de que el Comité Ejecutivo Nacional del PAN ratificó la decisión de su dirigente, Gustavo Madero Muñoz, de cancelar la asamblea estatal programada para el día 20 próximo donde se elegiriía a su nuevo presidente, Hernán Cortés Berumen y sus aliados analizan la conveniencia de recurrir o no a los tribunales.
Hasta ayer aun discutían los pros y contras de enfrentarse a su dirigencia nacional, a sabiendas de que aun y cuando ganaran el pleito en la mesa, se efectuara la elección del nuevo dirigente y fuera electo el diputado Miguel Ángel Monraz, nada asegura que esto otorgue ventaja alguna a Cortés Berumen en su aspiración por ser el candidato a la gubernatura.
Por el contrario, han advertido algunos panistas, el CEN podría hacer valer su facultad estatutaria de designar al candidato al gobierno estatal, decisión que por supuesto no recaería nunca en Hernán Cortés, amén de que sus aliados también podrían enfrentar bloqueos desde la dirigencia nacional para aspirar a cargos de elección popular.
Y esta advertencia no ha sido ignorada por Hernán y sus aliados, donde hay quienes consideran que lo mejor es acatar la decisión de la dirigencia nacional y confiar en que será el trabajo que se haga al interior de la militancia panista la que le pueda dar al primero la candidatura para llegar a Casa Jalisco.
Se asegura que aun no han definido nada, pero que el análisis continúa muy seriamente, pues no quieren ver frustradas sus aspiraciones por el capricho de una elección que les puede resultar contraproducente, y confiando en que Iván Argüelles, el dirigente interino, sabrá hacer el trabajo que tiene encomendado.