Luego de que en el pleno del Supremo Tribunal de Justicia se aprobó por mayoría recurrir a la controversia constitucional contra las reformas al Poder Judicial aprobadas el mes pasado por otra mayoría del Congreso del Estado -los diputados de Morena votaron en contra-, el gobernador Enrique Alfaro Ramírez abrió en su cuenta de Twitter un hilo de comentarios que reflejan su animadversión hacia los magistrados y que vale la pena analizar y hacer algunas precisiones.

Escribió: “Hace apenas un mes les platicaba que, en el @LegislativoJal, se aprobó la iniciativa que envié para reformar al Poder Judicial, acabar con las cuotas políticas y eliminar privilegios grotescos para magistrados”.

Precisemos: Las cuotas políticas no se registran en el Poder Judicial sino en el Poder Legislativo donde los partidos políticos, a través de sus fracciones parlamentarias, o sea los diputados, se reparten los espacios tanto en el Supremo Tribunal de Justicia como en el Consejo de la Judicatura, donde por cierto el partido del gobernador, Movimiento Ciudadano, colocó a un consejero. Y los “privilegios grotescos” de los que dice gozan los magistrados, no se los dieron ellos sino que fueron también los legisladores quienes se los aprobaron.

Escribió: “Hoy, con 16 magistrados que votaron a favor, una abstención y otro que no votó, se decidió que el Supremo Tribunal de Justicia interpondrá una controversia constitucional para no permitirlo”.

Precisemos: La controversia constitucional es una herramienta que tienen los Poderes, incluido el Ejecutivo que representa el gobernador Alfaro, a la que pueden recurrir para combatir una decisión de otro poder que consideran violentan su autonomía e independencia o que les afectan indebida e injustamente. Los magistrados simplemente hicieron uso de ese derecho que la propia Constitución les otorga.

Escribió: “Imagínense: aprobaron ir en contra de una reforma constitucional que ni siquiera ha terminado su proceso. Eso jamás se había visto y lo hicieron porque tenían prisa de irse de vacaciones. Así el descaro”.

Precisemos: No es la primera vez que los magistrados aprueban ir en contra de una reforma constitucional cuyo proceso aún no termina y que consideran les afecta, pues eso ha sucedido en infinidad de veces; otra cosa es cuándo la presentan, y para ello existen fechas fatales como es el caso, que los magistrados deben de aprovechar o de otra manera queda sin sustento su controversia. O sea, los magistrados aprobaron recurrir a la controversia, pero la presentarán de acuerdo a los tiempos legales. Por eso tampoco es correcto que lo hayan hecho por la prisa de irse de vacaciones, sino que con su aprobación pretendieron evitar un “albazo” del Ejecutivo y Legislativo, por un lado, y por el otro que precisamente por estar de vacaciones no puedan recurrir a un instrumento al que tienen derecho porque los tiempos legales ya fenecieron a su regreso. Por lo tanto, no veo el descaro.

Escribió: “Lo peor es que lo hicieron justo cuando @SNietoCastillo, Titular de la UIF del @GobiernoMX, vino a anunciar 8 investigaciones abiertas a jueces y magistrados por posible enriquecimiento ilícito. He aquí 2 agendas totalmente contrarias, el mismo día, sobre el mismo Poder Público”.

Precisemos: Como periodista, tuve que indagar detalles de este proceso y sucede que al interior del Supremo Tribunal de Justicia se discutió cuándo era el momento para someter a votación si se iban o no a la controversia. Hubo magistrados que propusieron la sesión del 2 de agosto; otros que fuera el último viernes -o sea mañana- antes de irse de vacaciones; y algunos más que se hiciera en la última sesión de la semana antes de vacaciones, o sea el martes 9. Esta última fecha fue la que se acordó por mayoría y por eso sucedió ese día. La visita de Santiago Nieto fue mera coincidencia.

Escribió: “Por eso, también quiero reconocer a la otra parte, a los 11 magistrados que votaron en contra y que demostraron su congruencia y voluntad para hacer lo correcto”.

Precisemos: No, los 11 magistrados no votaron en contra de recurrir a la controversia como figura jurídica para combatir una decisión del Legislativo que consideran les daña. Esos magistrados votaron en contra de cuándo presentar la controversia, de la fecha o del momento conveniente para hacerlo, pues como el presidente Ricardo Suro, eran de la opinión de que se presentara después de que se conocieran las reformas a la Ley Orgánica del Poder Judicial, lo que la mayoría consideró que hacerlo entonces los dejaba ya sin materia para acudir ante la Suprema Corte porque las reformas constitucionales ya habrían entrado en vigor.

Escribió: “De verdad espero, por el bien de Jalisco, que esta controversia no los haga salirse con la suya, que gane la austeridad y la responsabilidad, que no se permitan más abusos y despilfarros”.

Precisemos: Si los magistrados ganan la controversia, no es salirse con la suya sino demostrar que la ley estaba de su parte. Si la pierden, la misma ley les demostrará que no tenían la razón. La resolución de la Suprema Corte, en uno u otro sentido, terminará siendo por el bien de Jalisco, pues quedará de manifiesto que se hizo respetar el estado de derecho. Si pierden los magistrados, no quiere decir que ganó la austeridad ni la responsabilidad, ganó lo que establece la ley y es esa ley la que les daría la razón a los diputados. No más. Y si ganan, tampoco significa que ganaron los abusos y el despilfarro. Reitero: si ganan es porque la ley está de su parte. No más.

Escribió: “El recurso público no está para hacer millonarios y esta es una gran oportunidad para probarlo. Esto aún no termina y estoy seguro de que el pueblo de Jalisco sabrá cómo hacerlos recapacitar”.

Precisemos: Estamos de acuerdo que el recurso público no está para hacer millonarios, pero ese ejemplo debe ponerlo primero el Ejecutivo, no gastando montos millonarios en empresas que le manejan la comunicación oficial, teniendo una oficina establecida para eso con un gasto no menor, o no llevando a cabo licitaciones a modo para favorecer con montos millonarios a amigos. Estos si sería un gran momento para probarlo. Y en este asunto de la controversia constitucional del Poder Judicial en contra del Poder Legislativo, nada tiene que ver el pueblo de Jalisco, es un asunto entre Poderes con la intervención de instituciones, como la Suprema Corte, creadas por ley para dirimir diferencias como la que hoy es tema.

Así, pues, hay discursos que se escuchan bonito, pero no se ajustan a la realidad y sí, en cambio, pretenden modificarla, manipularla, para hacer creer cosas que en esa realidad no son como las pintan… o las escriben.