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Julio César Hernández
Parece que el secretario de Promoción Económica, Alonso Ulloa Vélez, trae la suerte de espaldas cuando de cargos partidistas se trata, y hoy resulta más doloroso cuando es mencionado como uno de los precandidatos del equipo del gobernador Emilio González Márquez a sucederlo.
Las ocasiones que Ulloa Vélez ha sido legislador, ha sido gracias a la figura de representación proporcional; o sea plurinominal. Cuando aspiró a la dirigencia estatal, se quedó en el camino. No le fue muy bien cuando se integró al equipo de campaña del entonces candidato a la presidencia Felipe Calderón. González Márquez lo designó coordinador de Políticas Públicas, en donde nunca se conoció lo que hizo o poco se supo. Gracias a que quedó vacante la titularidad de la secretaría de Promoción Económica, hoy ahí se desenvuelve haciendo un papel aceptable.
Sin embargo, quiso ser consejero nacional del Partido Acción Nacional… y se quedó en la orilla. No quedó en la lista de elegidos, mientras sus compañeras María del Carmen Mendoza y Carmen Lucía Pérez sumaban votos a favor y lograron quedar entre las elegidas.
¿Tiene efectos negativos el no quedar dentro del Consejo Nacional del PAN para sus aspiraciones por la candidatura de su partido a lan gubernatura? ¿Qué mensaje se envía a los militantes panistas jaliscienses el que Ulloa Vélez no haya llegado al Consejo Nacional y sí, en cambio, su adversario en el equipo, Fernando Guzmán Pérez Peláez, secretario general de Gobierno?
Sin duda que quedar fuera del Consejo Nacional “pega” en el ánimo de Alonso Ulloa. Y sin duda que tendrá sus efectos, en contra, para su aspiraciones de habitar Casa Jalisco.