Vaya tarea ingrata que le tocó hacer al dirigente estatal de Movimiento Ciudadano, Manuel Romo Parra: revivir los “entuertos” que dejó la mesa que encabezó el sábado pasado en Casa Jalisco el gobernador Enrique Alfaro Ramírez, y montar el absurdo teatro de la simulación carente de toda credibilidad, ayer en una intempestiva rueda de prensa convocada a última hora.

Sin “deberla ni temerla”, Romo Parra tuvo que dar la cara y salir a enmendarle la plana al gobernador Alfaro Ramírez, quien asumiendo el papel del presidente del partido fijó las “reglas del juego”, les “leyó la cartilla” y les ofreció “piso parejo” a los aspirantes a sucederlo: Clemente Castañeda Hoeflich, Alberto Esquer Gutiérrez y Jesús Pablo Lemus Navarro, quien en particular exigió que Dante Delgado participe en la designación del candidato a la gubernatura y no sea una decisión sólo de Enrique Alfaro.

Con premura, Manuel Romo montó una escenografía que tarde que temprano se le vendrá abajo por carecer de todo sustento, como decir que el gobernador Alfaro y el partido tienen claro que la conducción del proceso interno para elegir al candidato a la gubernatura corresponde “exclusivamente” al partido, y asegurar que el gobernador “no se va a inmiscuir” en el proceso interno para seleccionar al candidato a sucederlo.

Pero la simulación “madre” de este montaje fue anunciar la decisión -seguramente tomada “sobre las rodillas”- de designar a Clemente, Pablo y Alberto, así como a Salvador Zamora y a Verónica Delgadillo, “delegados políticos” en 10 municipios -dos cada uno de ellos- para que los visiten los fines de semana, “fuera de su horario de trabajo” (¡!), y realicen tareas que le corresponden a la dirigencia del partido. Pero, además, cada uno tendrá detrás de ellos a los llamados secretarios técnicos que los estarán vigilando para que respeten la Ley Electoral -que no hagan proselitismo a su favor- y los acuerdos que los cinco asumieron con la dirigencia.

Prueba de que todo se organizó “sobre las rodillas” es que los aspirantes harán trabajo político, a partir de ahora y hasta que inicie el proceso electoral (septiembre o noviembre), en aquellos municipios donde Movimiento Ciudadano perdió las elecciones en 2021, distribuidos de la siguiente manera: Delgadillo, Zapotlán y Colotlán; Castañeda, Puerto Vallarta y Tamazula; Lemus, Tepatitlán y Jocotepec; Esquer, Ocotlán y Tala; y Zamora, La Barca y Lagos de Moreno.

Pero resulta que de estos 10 municipios que supuestamente Movimiento Ciudadano perdió en el 2021, este partido actualmente gobierna en tres de ellos: Colotlán, con José Julián Quezada; Jocotepec, con José Miguel Gómez López; y Lagos de Moreno, con Tecutli José Guadalupe Gómez Villalobos.

¿Y sabe qué tarea harán los cinco “fantásticos” en estos municipios, bajo la vigilancia de los secretarios técnicos, y que supuestamente es trabajo que deben hacer las dirigencias estatal y las municipales? Romo lo explicó así: “Buscarán liderazgos locales y la unión de los equipos”, además, “harán un trabajo al interior (sic) de los simpatizantes de Movimiento Ciudadano”; se encargarán “de unificar a los que pudieran estar interesados en participar en los procesos del 2024”; serán “responsables políticos de que ese municipio se gane”; “establecerán condiciones de unidad para llegar fortalecidos al 2024”; “identificarán al presidente del comisariado ejidal, a un liderazgo en especial e invitarlo al proyecto”.

Pero Manuel Romo reveló otro elemento que confirma que todo es una simulación, una pantomima, un teatro del absurdo, pues mandarán a Verónica, Clemente, Alberto, Salvador y a Jesús Pablo a buscar lo que el partido ya encontró desde tiempo atrás: los liderazgos de Movimiento Ciudadano.

El propio Romo Parra lo confesó en la misma rueda de prensa: “Nosotros conocemos suficientemente a los liderazgos de nuestro movimiento en todos los municipios”, pero al mismo tiempo dijo que “es la forma en que estaremos trabajando de manera coordinada con ellos (aspirantes)”.

No se ría, pero tengo que preguntarlo: ¿Necesitarán los aspirantes a la candidatura de MC al gobierno, de 16 fines de semana -si es de junio a septiembre- o de 24 fines -si es de junio a noviembre- para encontrar a los liderazgos del partido y de la oposición -para invitarlos a pasarse a sus filas-, en esos municipios? ¿No les bastará con un fin de semana para preguntarle al párroco, al tendero, al médico o al profesor quiénes son esos liderazgos que andan “pedidos”? ¿No tendrán con un fin de semana para invitarle un café, un desayuno,comida o cena a esos líderes e invitarlos a que se sumen al proyecto?

Estoy seguro que, de entrada, Clemente Castañeda y Alberto Esquer ya saben quiénes son los liderazgos no sólo de los municipios que les asignaron, sino de los 125 del estado.

En fin, no hay duda de que es muy ingrata la tarea de Manuel Romo cuando tiene que hacerla de “bateador emergente”, ante las “pifias” cometidas en Casa Jalisco.

Por lo pronto, auguro que este teatro, este montaje, durará menos que la rueda de prensa de ayer.

Y si no, al tiempo…