A reserva de que pudiese haber modificaciones en la lista de quienes integran la planilla de candidatos a regidores del Partido Movimiento Ciudadano a Zapopan, entre la que se dio a conocer el fin de semana pasado y la que se registró anteayer ante el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana, vale preguntarse:
¿Quién es el candidato de Enrique Alfaro Ramírez a la presidencia municipal zapopana: el panista Guillermo Martínez Mora o el neoalfarista Jesús Pablo Lemus Navarro?
La pregunta es obligada al conocer a los diez candidatos a regidores que acompañarán al ex dirigente sindical del empresariado y que salvo los dos primeros, el resto no le dice nada a la ciudadanía, aunque todos ellos merecen mi respeto. La lista de estos diez aspirantes, aparte de Jesús Lemus, es:
- Fabiola Raquel Guadalupe Loya Hernández.
- Ricardo Rodríguez Jiménez.
- Laura Gabriela Cárdenas Rodríguez.
- Mario Alberto Rodríguez Carrillo.
- Tzizi Santillán Hernández.
- José Hiram Torres Salcedo.
- Gabriela de Obaldía Escalante.
- Oscar Javier Ramírez Castellanos.
- Ana Lidia Sandoval Garc{ia.
- Esteban Estrada Ramírez.
- Myriam Paola Abundis Vázquez.
- José Luis Tostado Bastida (Síndico).
Como podrá observarse, ni siquiera quien se registró como precandidato a la alcaldía para hacerle el “paro” a Jesús Lemus y le entregó los espacios públicos de su propiedad para que colocara su propaganda, fue colocado en una mejor ubicación. Me refiero a Esteban Estrada Ramírez, quien aparece en el lugar número… ¡11! no obstante que tiene más carrera o mayor experiencia política que los siete que le anteceden inmediatamente. Hay quienes consideran que debió ser colocado en la posición cuatro, pero ese espacio se lo reservaron a una emilista.
De acuerdo a como se aprecia el panorama electoral en Zapopan y ante el crecimiento que registra el Partido Acción Nacional en este municipio, propios y extraños, dentro y fuera del Partido Movimiento Ciudadano, coinciden en que quien “palomeó” o integró esta lista de candidatos -léase Alfaro Ramírez y no Lemus Navarro- demostró su interés por asegurar la llegada al próximo Cabildo en Zapopan de los tres o cuatro primeros ubicados en la lista, incluyendo al postulado a la alcaldía, pues el perfil de los aspirantes es muy bajo, no le dicen nada a la ciudadanía y mucho menos destacan por sumar votos que le den la mayoría para triunfar.
Y la pregunta que se planteó de inmediato fue: ¿Será que Enrique Alfaro apuesta a favor de Guillermo Martínez Mora y no de Jesús Pablo Lemus Navarro, considerando que con el primero tiene una afinidad más cercana no sólo familiar sino, inclusive, de trabajo político tras la postura que el abanderado panista asumió en el Congreso del Estado con el llamado “Bloque Opositor” que conformaron él y los cinco diputados alfaristas además de dos ex panistas ahora neoalfaristas?
¿Qué le puede representar al proyecto y al propio Enrique Alfaro alguien como Jesús Lemus que ya hace tres años lo dejó “colgado de la brocha” cuando rechazó ser el candidato a la alcaldía -dicen que le aconsejaron no aceptar-, pretextando que se encontraba en “alta mar”, y que obligó a Alfaro a tener que postular a Augusto Valencia? Pero, además, alguien que no tiene mayor influencia ante los zapopanos y que cuya ventaja para lograr su postulación fue que quien tenía mayores méritos, experiencia y capacidad para ser el abanderado tenía como desventaja “ser demasiado panista” -como le dijo el propio Alfaro-, refiriéndome a Macedonio Tamez Guajardo.
Y tan no le representa nada o le significa muy poco Jesús Pablo, que dicen lo obligó a grabar el famoso espot -que tanto se prestó a “memes”- donde ambos aparecen en un parque y el segundo confiesa apostarle al proyecto de Alfaro, pues descubrieron que Lemus pretendía, en un momento dado, irse “por la libre” con el sueño de llegar a ser rival del ex perredista en la lucha por la candidatura al gobierno estatal en 2018.
Así, pues, no tengo duda que a Enrique Alfaro le convendría y le provocaría mayor satisfacción un eventual triunfo de Guillermo Martínez Mora, antes que dolerle y entristecerle la derrota de Jesús Pablo Lemus.
Y si no, al tiempo.
