Julio César Hernández
La amenaza de que el PRI perdiera la mayoría que ganó en las urnas el pasado cinco de julio y se convirtiera en fracción minoritaria en la próximo Legislatura, tras la salida de la fracción priista de los diputados Ana Bertha Guzmán y Javier Gil Olivo, militantes de Nueva Alianza, quedó disipada.
Hoy por la tarde-noche el Partido Nueva Alianza dio marcha atrás al rompimiento de la coalicion -y que hizo público a través de un comunicado de prensa enviado a los medios y publicado como desplegado en un diario local-, pues ambos partidos llegaron a un acuerdo.
Según fuentes cercanas a los negociadores, dicho acuerdo consiste en lo siguiente:
– El PANAL ocupará la secretaría general del Congreso durante la primera mitad de la Legislatura que se instalará el próximo uno de febrero, en tanto que el PRI cerrará en el cargo el período restante.
– Nueva Alianza presidirá dos comisiones legislativas, y
– Además tendrá a su cargo dos Direcciones.
Se da por un hecho que quien se encargue de la secretaría general por parte del PANAL sea el ex candidato a diputado Enrique Trejo, mientras que por el lado del PRI aun no se conoce quién ocuparía la posición posteriormente.
De esta manera, pues, cuando los 39 integrantes de la próxima Legislatura acudan mañana al Palacio Legislativo -donde por cierto se asegura que de manera extraña se dio el día a los trabajadores, salvo a las edecanes- a rendir protesta, la conformación de la misma será como resolvió el Instituto Electoral del Estado:
Cuatro fracciones parlamentarias representadas: PAN, PRI, PRD y PVEM.
Y la integración de la misma quedará de la siguiente forma: 18 diputados del PRI, 17 del PAN, dos del PRD y dos del Verde Ecologista.
Ahora resta esperar cómo le va a explicar el PANAL a los ciudadanos los “tropiezos” que ha venido dando bajo el pretexto de que lo hace a favor de la pluralidad y pensando en el beneficio de la sociedad, aunque seguramente esa explicación es lo que menos le importa a Nueva Alianza.
24 enero, 2010
