Si actualmente algún presidente municipal tiene la autoridad moral para asumirse como parte del proyecto del Grupo Jalisco que inició en 2009 en Tlajomulco y posteriormente se fusionó con Movimiento Ciudadano, ese es Salvador Zamora Zamora, quien comenzó “picando piedra” al igual que Clemente Castañeda, Hugo Luna, Ismael del Toro, Alberto Uribe, Fabiola Loya y, por supuesto Enrique Alfaro, en aquellos años del nacimiento de esta corriente política. Años después se sumaron otros que hoy forman parte del grupo Jalisco, como Mirza Flores y Verónica Delgadillo.

Pocos munícipes como Zamora Zamora pueden abrogarse la frase: “nuestro proyecto”, porque trabajó desde el inicio en él y su virtud fue saber esperar los tiempos, su tino para dar un paso al lado y posteriormente retomar el rumbo que se había trazado desde el principio y dar el paso al frente para convertirse en el cuarto presidente municipal del Grupo Jalisco en Tlajomulco y el primero de ellos en lograr reelegirse.

Hoy Zamora Zamora está en la antesala de poder ser el candidato de MC a la gubernatura.

Al rendir ayer su segundo informe de gobierno, Salvador Zamora fue firme en su confesión: “Me ha tocado estar desde el inicio en este proyecto político y en todas las batallas (…). Por eso, hoy quiero refrendar mi compromiso con el proyecto y llamar una vez más a trabajar unidos y en equipo (…). Reitero que estoy listo para la siguiente etapa. Hicimos de Tlajomulco el motor económico de Jalisco y lo que sigue es hacer de Jalisco el motor económico de México. ¡Por eso quiero ser Gobernador de Jalisco! Lo que sigue es poner todo nuestro empeño por nuestro estado…”.

Después de que lo hizo Castañeda Hoeflich en su informe de actividades legislativas la semana pasada, Salvador Zamora fue el segundo aspirante que aprovechó el marco de su informe de gobierno para declarar a propios y extraños el siguiente objetivo en su carrera política, luego de dar cuenta de los buenos resultados obtenidos al frente del Ayuntamiento y de convertir a Tlajomulco, como lo ha reiterado, en el “motor económico de Jalisco”.

Salvador Zamora se ha caracterizado por su discreción, por hacer un trabajo político fuera de escándalos o de declaraciones estruendosas, pero huecas; por su lealtad al proyecto político dentro de Movimiento Ciudadano; por no “engancharse” con los provocadores ni mucho menos descalificar a los suyos; por no desgastarse ni “quemar sus naves en infiernitos; por no caer en la soberbia que a otros los ha llevado a “perder piso”, sino que ha sabido caminar con pies de plomo y dar resultados en su municipio.

Contra lo que sus adversarios dentro de MC afirman, Salvador Zamora es otra de las “cartas” que su partido tiene sobre la mesa no sólo para contender por la gubernatura sino para ganarla, porque es político y sabe hacer política “de la buena”, como dicen quienes aceptan que la política es cosa seria y no un juego ni pretexto para que “chacoteo” en redes sociales.

Así, pues, ahí está Salvador Zamora Zamora, anotado y apuntado en la lista de serios aspirantes a la gubernatura, y no es más que el resultado de la virtud de conocer el tiempo.