Julio César Hernández
Mientras los panistas están entretenidos en arremeter en Guadalajara en contra de Jorge Aristóteles Sandoval Díaz, en Zapotlanejo su candidato a diputado local, Héctor Álvarez, los trae “de cabeza” no solo apoyando al candidato del Partido Verde a la presidencia municipal y dándole la espalda a su correligionario que busca el mismo cargo, sino retando a su misma dirigencia estatal e ignorando el ultimátum que le dieron para que se metiera “al redil”.
Y es que resulta que a Héctor Álvarez, presidente municipal con licencia, nada más no le cayó nada bien la designación de José Brionez Carvajal como candidato del PAN a la alcaldía, y en un acto de rebeldía hacia su partido se ha dedicado -acusan los propios panistas y lo han atestiguado los propios zapotlanenses- a apoyar la candidatura de Juan José Jiménez, aspirante del Verde Ecología a la alcaldía, no sólo con el aparato del gobierno municipal que encabeza como interino Julián de la Torre Álvarez, sino hasta en la propaganda, pues donde hay una barda pintada a favor de Álvarez, al lado hay otra pinta en pro de Jiménez.
El capricho y la rebeldía de Héctor Álvarez ya cansaron a algunos panistas, que cuentan que le dieron de plazo hasta el viernes pasado para manifestar su apoyo -forzado, por supuesto-, a su compañero de partido que busca sucederlo. Dicen -según lo reporta el periódico Cuarto Poder, de Zapotlanejo-, que esto ocurrió durante la pasada sesión del Comité Directivo Estatal, donde algunos inconformes pidieron su expulsión, pero que Jorge Sánchez se comprometió a que en 72 horas el rebelde se manifestaría favor del candidato del PAN.
Se advirtió ahí mismo que si esto no sucedía, entonces le revocarían la candidatura, pues alertaron de que si seguía con esa actitud, se corría el riesgo de que en el Congreso del Estado, en caso de ganar, pudiera actuar en contra de la propia bancada de Acción Nacional.
Pero, al parecer, a Héctor Álvarez la advertencia le hizo “lo que el viento a Juárez”, pues ahora en sus bardas desapareció el azul y el emblema del PAN y sólo se lee: “Aquí estuvo Héctor (y) sigue siendo candidato” (foto).
¿Qué dirá de todo esto Eduardo Rosales Castellanos, quien le salió un “respondón” en Zapotlanejo? ¿Dejará que se le “suba a las barbas” o lo someterá al orden? Inclusive, ¿se atreverán a revocarle la candidatura? ¿Enviará a Abraham González a poner orden? Esperamos respuestas.
8 junio, 2009
