¿Qué hizo el síndico municipal de Tlaquepaque, Juan David García Camarena, para despertar la ira de la alcaldesa María Elena Limón García en su contra…?
¿O debemos preguntar: qué no hizo o qué no quiso hacer…?
Porque no puede preguntarse otra cosa que lo anterior ante la saña con la que la alcaldesa Limón García ha actuado en contra de su síndico -surgido de un proceso electoral como ella-, y como ningún otro presidente municipal lo ha hecho contra quien ha ocupado este cargo en muchos años atrás. O al menos no recuerdo un caso así.
El “golpeteo” de “La Nena” Limón en contra de David García comenzó desde febrero cuando destituyó a su director general jurídico y a otro de sus colaboradores cercanos, a lo que el síndico no pudo oponerse. Pero en lugar de sus dos colaboradores le enviaron a dos abogados que se negaban a darle cuentas a él y únicamente querían que estampara su firma en documentos que le presentaban sin previa consulta.
De entonces a la fecha, según trascendió en los corrillos del Ayuntamiento alfarista, la relación entre la alcaldesa y el síndico había sido más que dificil y, según algunos enterados, el acabose vino cuando García Camarena se enteró que Limón García daría un “golpe” en su contra al desmantelarle no sólo su equipo sino a todo el personal que tenía alguna relación con la Sindicatura, lo que lo llevó a usar la tribuna en la antepasada sesión de Cabildo y hacer un ejercicio jurídico sobre las facultades, atribuciones  y tareas del Secretario General y del Síndico, para luego anunciar la destitución de los dos funcionarios que le envió la alcaldesa.
Ahí vino luego la reacción de la alcaldesa “desmantelándole” a todo su equipo de colaboradores y enviándolos a otras áreas del Ayuntamiento.
Después vino un intento por recomponer las cosas en una reunión entre Limón García y García Camarena donde estuvo como testigo el dirigente del Partido Movimiento Ciudadano, Guillermo Medrano, y en la que la alcaldesa asumió unos compromisos que al paso de los días no cumplió. Pero no sólo no cumplió, sino que tenía preparado otro “ramalazo” en contra del síndico que dio ayer en la sesión de Cabildo donde para sorpresa de todo los regidores decidió retirarle facultades a García Camarena y dárselas a dos perfectos desconocidos abogados.
Pero además de eso, a García Camarena le retiró la presidencia de la Comisión de Reglamentos y sólo lo dejó al frente de la Comisión de Estacionómetros.
Para lograr su cometido, “La Nena” Limón contó con la docilidad de los regidores de Movimiento Ciudadano que con su voto a favor le cumplieron su capricho.
Con lo sucedido en la sesión de Cabildo antepasada y la de ayer, la pregunta para encontrar una explicación de la conducta de la alcaldesa Limón García en contra del síndico García Camarena es una:
¿Qué hizo o qué no hizo Juan David García Camarena que despertó la ira de la presidente municipal de Tlaquepaque?
Pero hay otra pregunta: ¿Por qué el silencio del alfarismo ante lo que pasa en Tlaquepaque?
Mañana hablamos de esto último…