Gilberto Pérez Castillo
Un acto más del descaro en el que han incurrido los candidatos y dirigentes del PAN en Jalisco es el que protagonizan los aspirantes derrotados a alcaldes de Zapopan y Tlaquepaque, Yhanjo Razón y Guillermo Martínez Mora.
Ahora resulta que después de haber sido derrotados, no obstante que echaron mano de todas las trampas posibles en una elección, Yhanjo y Guillermo se dicen víctimas.
Los candidatos del PAN en la zona metropolitana echaron mano de las estructuras municipales y estatal en su beneficio, usaron las policías como instrumento electoral, rebasaron los topes de campaña, gastaron más dinero que sus opositores, hicieron guerra sucia difamando a sus contrincantes, tuvieron más espacios en los medios electrónicos de comunicación y contaron con una autoridad electoral que ellos mismos designaron.
¡Y todavía creen tener autoridad moral, política y jurídica para impugnar!
Los alegatos de los panistas, por supuesto, que no tienen futuro jurídico y sólo refleja que nunca estuvieron conscientes de que la ciudadanía les cobraría tantos excesos en las urnas.
Se necesita mucha altura personal y política cuando se pierde una elección, por muy doloroso que esto sea, y Guillermo y Yhanjo están demostrando no tenerla.
8 julio, 2009
