Por Julio César Hernández
Enmedio de versiones mañaneras que anunciaban su relevo como presidente interino de Tonalá, el sucesor de Jorge Vizcarra Mayorga, Salvador González del Toro, rechazó que fuera dejar la alcaldía.
Por el contrario, aseguró, “voy a empujar para delante a Tonalá”, luego de que sale de su “cuarentena”; o sea, del plazo de 40 días que le pidió a los regidores para empaparse de la administración municipal.
Sin embargo, parece que la “cuarentena” no le ayudó mucho a González del Toro para entender qué es gobernar un municipio y encabezar un Ayuntamiento. Al menos así lo reflejan sus propias palabras cuando explicó qué hará ahora que, supuestamente, ya se “empapó de la administración municipal”. Lea lo que dijo qué hará:
“Voy a salir a la sociedad a empezar a inaugurar obras, participando en actos cívicos; voy a cambiar algunos puestos, a acomodar gente; lo que esté funcionando lo voy a dejar, lo que no, lo voy a cambiar…”
¿Qué nadie le ha dicho al alcalde tonalteca que gobernar un municipio no es sólo “salir en la foto” sino resolver las necesidades de la ciudadanía?
Si no, pues que pida otro plazo de 40 días para volverse a “empapar”, al fin que en Tonalá no sfren del megacorte del agua.