Estratégica fue la firma de la alianza Va por Jalisco realizada ayer por las dirigencias estatales del PAN, PRI y PRD, prácticamente un mes antes de que se revele el nombre de quien encabezará el Frente Amplio por México, pues de entrada proyecta certeza de que los tres partidos mantienen la unidad por encima de todo y, por supuesto, el evento corresponde a instrucciones recibidas desde la capital del país.
Pero también dejaron claro dos cosas más: primero, que si no hay alianza nacional de Movimiento Ciudadano tampoco lo habrá estatal, aunque quizás en lo individual los emecistas serían bienvenidos si hubiese desprendimiento del Grupo Jalisco, sin que ello signifique que los alfaristas tendrían ventaja alguna en el reparto de candidaturas ni mucho menos; segundo, ninguna de las dirigentes partidistas se acordó, ni mencionaron por equivocación, a los representantes de las 34 organizaciones que acudieron ante ellas semanas atrás y les entregaron un documento en donde les exigían que querían candidatos “ciudadanos”. De esto, ni una palabra.
Cabe destacar que fueron muy prudentes al referise a Movimiento Ciudadano, aunque la priista Haro Ramírez fue severa al decir que este partido y Dante tendrán la oportunidad de demostrar si están a favor de México o le hacen el trabajo sucio a Morena en caso de no sumarse al Frente Amplio, en tanto Diana González aseguró que tienen comunicación formal y oficial con los partidos locales Hagamos y Futuro, aunque aún no han hablado en concreto de una posible integración de ellos a esta alianza,
Interesante resultó conocer también que ya tienen muy claro y definido cómo jugarán el 2024. Irán juntos por la gubernatura, por las senadurías, por las diputaciones federales y las estatales, mientras que en el caso de las presidencias municipales serán muy cuidadosas y analizarán en cuáles pueden ir en coalición y en cuáles es mejor contender individualmente, tomando en cuenta que, principalmente en los municipios del resto del estado -los no metropolitanos-, las diferencias políticas son más marcadas y las luchas electorales generaron hasta divisiones. Sin duda, una muy buena decisión.
Otro punto que fue muy claro en esta firma de la alianza, es que Diana González, Laura Haro y Natalia Juárez saben y están conscientes de que en las condiciones existentes de una alianza nacional entre sus partidos, están sujetas y supeditadas a las decisiones que tomen y a los acuerdos que lleguen Marko Cortés, Alejandro “Alito” Moreno y Jesús Zambrano. O sea, ninguna pretende tomar decisiones por su cuenta.
Ejemplo de ello fue lo que declaró la perredista Natalia Juárez cuando se les cuestionó sobre la posibilidad de que la Alianza por Jalisco lance como candidata a una mujer. Dijo: “Sobre el tema de la paridad no lo hemos hablado; sin embargo, cabe la posibilidad que existan lineamientos de paridad que vengan desde lo nacional. Acordémonos que en el Estado de México las tres candidatas fueron mujeres, por lineamientos y eso también estamos por verlo. Aún no hemos decidido el tema del género”.
Por último, lo que también dejó claro el evento de la firma de esta Alianza por Jalisco, es que a diferencia de otras ocasiones, desde ahí advierten la posibilidad de que Morena pudiera levantarse con la victoria por la gubernatura, tomando en cuenta lo que han reflejado las encuestas en los últimos meses. Por eso su afirmación de que el objetivo es evitar que Morena gane las elecciones.
