Corría el mes de abril de 2006 y Jorge Aristóteles Sandoval fracasaba en su primer intento por ser candidato del PRI a la presidencia municipal de Guadalajara. Tres años después, en el 2009, lograría su objetivo, ser candidato y alcalde, para desde ahí llegar a la gubernatura en 2012.

En aquella fecha, siendo diputado local, llegó a la recta final como el más serio y fuerte contrincante de quien terminó obteniendo la candidatura: Leobardo Alcalá Padilla, a favor de quien declinó a petición expresa del entonces dirigente nacional del PRI, Roberto Madrazo Pintado, quien le prometió que sería candidato a diputado federal por la vía plurinominal, pero no le cumplieron y quedó fuera de la lista.

Esta es parte de la entrevista que sostuve con Aristóteles Sandoval y que publicamos en el extinto periódico Ocho Columnas en su edición dominical del 23 de abril de aquel 2006.

-Jorge, ¿te chamaquearon?

-Bueno, así sucede en la política. En la política hay cuestiones coyunturales que se dan en el momento de la toma de decisiones (…). Si bien no se da en esta elección, vamos a seguir trabajando y espero que en un futuro cercano puedas ver en mi una propuesta, un hombre de resultados, de compromisos, de palabra, porque siempre la he tenido. Yo creo en la palabra y creo que así se debe hacer la política, pero entre más va pasando el tiempo menos se cree en la palabra. Antes el crédito a la palabra era fundamental, ahora vemos que los distintos intereses inciden en la toma de decisiones…

-¿Hay dolor por el compromiso no cumplido?

-¡No, para nada! Yo simplemente doy vuelta a la página, sigo trabajando hacia adelante. Yo siempre dije que no buscaba la presidencia para tener un puesto, sino que la veía como una herramienta de cambio, y dije que si no llegaba a la presidencia, desde cualquier espacio iba a trabajar…

-¿Hay rencor en Jorge?

-En lo más mínimo. Con nadie. En la política debe uno estar preparado para todo esto. Hay ocasiones en que uno puede encabezar los proyectos y hay otras ocasiones en que quien quiere servir lo va a hacer desde el espacio en que se encuentra…

-¿Ya asimilaste esta derrota, esta mala experiencia o este amargo momento?

-Mira, derrota no fue porque nunca llegué a un proceso. Yo considero que, al contrario, he cosechado más experiencia, he visto ya la parte completamente negra y oscura de la política en carne propia, y esto para mi acervo experimental creo que se viene enriqueciendo (…). Yo no le desearía a nadie que esto le sucediera (…). ¡Claro que son tragos amargos! Pero te sirven para fortalecerte, para ver la vida desde otro punto de vista, para ser más sensible…

-¿Te habló Enrique Ibarra Pedroza para que te integraras al PRD o para que lloraras en su hombro porque a él tampoco Madrazo le cumplió?

-¡No, no, no! De ninguna manera. Además, no soy de esas personas que me pongo a llorar en el hombro de nadie. Asimilo, pienso, lo tomo con mucha madurez, con mucha seriedad, siempre veo hacia adelante, me fortalece y estoy seguro que próximamente daremos buenas cuentas.

Jorge Aristóteles Sandoval Díaz fue asesinado la madrugada de ayer en Puerto Vallarta. Fue regidor de Guadalajara, diputado local, presidente municipal de Guadalajara y gobernador de Jalisco.

Descanse en paz.