Cada vez resulta más evidente que Movimiento Ciudadano en Jalisco, encabezado por el primer emecista del Estado, el gobernador Enrique Alfaro Ramírez, ya tiene su candidato a la presidencia de la República en el 2024 y se llama: Marcelo Ebrard Casaubón.

La pregunta es: ¿Ebrard es también el candidato del dirigente nacional Dante Delgado Rannauro?

Ayer revelamos aquí en exclusiva el encuentro que el pasado sábado seis sostuvieron Alfaro Ramírez y Ebrard Casaubón en un salón privado del hotel Hyatt Andares, y en donde el Canciller le hizo saber a él y a los demás asistentes que la ex subsecretaria Martha Delgado era el enlace para tratar todo lo relacionado con su aspiración de ser el candidato de Morena a la presidencia de la República.

Por instrucciones del propio Marcelo Ebrard, el diputado Javier López Casarín, coordinador nacional de Plataforma Verde -expresión política que apoya y promueve su candidatura-, se reunió ayer muy temprano con los presidentes municipales de Guadalajara y Zapopan, Jesús Pablo Lemus Navarro y Juan José Frangie Saade, respectivamente, en el Palacio Municipal tapatío, a unos metros del lugar donde el legislador presidiría minutos después la presentación de Rocío Corona Nakamura como coordinadora del capítulo Jalisco de Plataforma Verde.

Trascendió que la dupla Lemus-Frangie habría recibido la petición de la dirigencia nacional de Movimiento Ciudadano de recibir y dialogar con López Casarín y no de Casa Jalisco. Qué platicaron, a qué acuerdos llegaron y qué compromisos se asumieron es aún desconocido, pero seguramente al paso de los días lo sabremos, tarde que temprano.

Para nadie es desconocida la vieja amistad que Dante Delgado tiene con Marcelo Ebrard y que data de aquellos tiempos cuando el hoy secretario de Relaciones Exteriores era el “escudero” del finado manuel Camacho Solís. Incluso, recuérdese que el veracruzano lo rescató cuando el PRD no lo postuló como candidato a la Cámara de Diputados y Movimiento Ciudadano lo “adoptó” como su candidato, proyecto que se frustró porque su candidatura fue anulada al haber participado en el proceso de elección en dos partidos distintos.

No sería extraño que si Morena -entiéndase López Obrador- descarta a Ebrard como su candidato presidencial, se apueste que nuevamente Movimiento Ciudadano lo volvería a rescatar, sólo que ahora surge una duda: ¿Hablar de Movimiento Ciudadano es hablar también de Dante Delgado? Para que suceda esta eventual “adopción” tendrían que darse los siguientes supuestos:

  1. Que Ebrard no sea candidato de Morena.
  2. Que Ebrard decida romper con López Obrador, con todo lo que ello represente (recuérdese la reciente decisión de Ricardo Monreal: “Prefiero no tener un cargo antes que traicionar al presidente”).
  3. Que Ebrard renuncie a Morena y a la 4T.
  4. Que Ebrard crea que basta ser candidato de otro partido para ser competitivo frente a los candidatos de Morena y de la alianza “Va por México”.
  5. Que Ebrard esté convencido de que el partido indicado para ganar la elección y ser presidente de la República es Movimiento Ciudadano, pese a su 8-10% de preferencia electoral en el país.

En este sentido, ¿de veras Dante Delgado volvería a “adoptar” a Marcelo Ebrard para confrontarlo, más que a los candidatos de Morena y de la coalición, al presidente Andrés Manuel López Obrador, cuando aún se apuesta a que la decisión del dirigente nacional de MC de no sumarse a la coalición opositora es un acuerdo de facto o tácito con Palacio Nacional para fracturar el voto y beneficiar a Morena?

Y esto es apenas una de las muchas aristas que tiene la candidatura de Ebrard, su relación con Dante y Alfaro, Movimiento Ciudadano y López Obrador.

Ya lo dijo en Puerto Vallarta el dirigente nacional del PAN, Marko Cortés: “Allá (Dante) no quiere sumarse a la alianza, pero aquí (Alfaro) sí. Hay que convencer al de allá”. Incluso, algunos empresarios jaliscienses han vertido la versión de que la decisión que tomará el gobernador Alfaro sobre su futuro es que solicitará licencia al cargo para irse a coordinar la campaña del Canciller, aunque no sabemos en qué escenario.

Esta versión no se me hace creíble, como tampoco creo que si no es candidato, Marcelo rompa con AMLO y se le enfrente respaldado con las siglas de los enemigos del Presidente de la República. Ya veo una declaración similar a la de Monreal.

Sin embargo, eso no sería impedimento -tome nota-, para que pronto veamos aparecer poco a poco en la zona metropolitana bardas pintadas a favor de Marcelo Ebrard.

Y si no, al tiempo…