Julio César Hernández
El dirigente estatal del PRI, Rafael González Pimienta, tuvo que poner en acción toda su larga experiencia política para convencer a su homólogo del Partido Nueva Alianza, Carlos Salazar Machado, que lo que trataban de venderle en el PAN eran “espejitos” para convencerlo de que rompiera la coalición y se aliara con éste partido.
Claro que no tuvo que esforzarse mucho, pero aseguran que fue muy claro con el dirigente del PANAL al hacerle ver la realidad de que junto al PAN su partido pocas posibilidades tenía de trascender, aun y cuando con la alianza de ambos tuvieran aparentemente la mayoría.
Cuentan que Salazar Machado le dijo que en el PAN le ofrecieron reconocer a sus dos diputados -Javier Gil Olivo y Ana Bertha Guzmán- como fracción y entregarle los recursos que le correspondían, pero González Pimienta pronto lo ubicó en la realidad al decirle que una situación podía tumbársela fácilmente ante los tribunales.
Además, el dirigente priista fue tajante al subrayarle que por supuesto no le iban a dar la secretaría general del Congreso para su ex candidato Enrique Trejo, porque ese espacio era para un priista, pero le ofreció acomodar en el Congreso a alguna de su gente, entre ellos al propio Trejo.
También le hizo ver que aun y cuando se aliaran con los diputados panistas, éstos finalmente terminarían poniéndose de acuerdo con la fracción priista para sacar adelante los asuntos que le fueran conveniente, por lo que era más lo que perdían que lo que ganaban en su alianza con el PAN.
Y además, entre otras cosas, le hizo ver que era imposible que en los 125 Ayuntamientos donde están como aliados con sus respectivos regidores fueran juntos y en el Congreso estuvieran enfrentados.
Total que Carlos Salazar terminó convencido de que la coalición con el PRI no sólo no le convenía romperla sino que era también una cuestión de honor y ética ir juntos en el trabajo legislativo, de ahí que posteriormente emitió el comunicado de prensa donde reconoce que gracias a su alianza con el tricolor tienen más de un centenar de regidores en 89 municipios y que, por lo tanto, dicha coalición estaba más que vigente.
Si bien dicen: “Más sabe el diablo por viejo, que por diablo”.
15 enero, 2010
