Foto: Twitter de @GomezAlvarezD

En febrero del año pasado los integrantes del Comité de Participación Social (CPS) del Sistema Anticorrupción pusieron “el grito en el cielo” cuando el diputado del PAN, José de Jesús Hurtado Torres, presentó la iniciativa para que se les eliminara el salario y su trabajo fuera honorífico, bajo el argumento de que eso los dotaría de mayor imparcialidad.

En noviembre del mismo año, estos consejeros advirtieron que para el 2021 les aplicarían una reducción del sueldo que percibían, y que era de 88 mil 435 pesos mensuales, pues el propio gobernador Enrique Alfaro Ramírez les anunció que para este año se reduciría el presupuesto para el Sistema Anticorrupción del Estado (SAE).

En esa ocasión, el que “brincó” por esa posible reducción salarial fue el consejero Jesús Ibarra Cárdenas, quien reclamó que esa disminución fuera pareja. “Si la reducción es pareja para la burocracia en general, yo digo que está bien, hay que apretarse el cinturón y es época de austeridad. También digo, si no es así (pareja), si sólo es contra el CPS, sí parecería que lleva algo de dedicatoria”. (NTR Guadalajara 03/11/2020).

Lo que tanto temían los integrantes del CPS -cuya labor es cuestionada no sólo por sus decisiones polémicas sino porque se asegura que su trabajo no va en relación a lo que ganan; o sea, no lo desquitan-, se concretó el pasado 18 de enero de este año cuando en sesión ordinaria se fijó el ajuste salarial y se determinó que ahora ganarían 70 mil 748 pesos mensuales, o sea 17 mil 687 pesos menos de lo que percibían el año pasado.

Ante esta decisión, quien ni tardo ni perezoso recurrió al Juzgado de Distrito a solicitar amparo en contra de dicha disminución salarial fue el consejero David Gómez Álvarez Pérez, según quedó asentado en el expediente 316/2021.

Según Gómez Álvarez Pérez -se asienta en el documento-, “la reducción presupuestal efectuada mediante la norma señalada, así como la aplicación de dicha disminución mediante el Acuerdo tomado en la sesión de fecha 18 de enero de 2021, tienen como efecto directo conculcar el derecho del suscrito a una remuneración adecuada como lo determina el artículo 127 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, ya que se reduce ampliamente los honorarios que percibía como miembro del Comité de Participación Social del Sistema Anticorrupción del Estado de Jalisco.

“Por su parte -añade- ese mismo acto reclamado violenta en términos generales el artículo 113 de la constitución, ya que con dicha norma se afecta la independencia de la actuación de los miembros del Comité de Participación Social del Sistema Anticorrupción del Estado de Jalisco, al sujetar las contraprestaciones que recibirán sus miembros a los designios de los poderes Ejecutivo y Legislativo”.

¿De veras una reducción salarial “afecta la independencia de la actuación” de los integrantes del CPS? ¿No es mejor, entonces, aquello que argumentó el diputado Hurtado Torres en su iniciativa de que como miembros honoríficos, sin recibir ni un peso de las arcas públicas, tendrían mayor imparcialidad en sus resoluciones?

Cada año, este organismo le cuesta a los jaliscienses 5 millones 306 mil 100 pesos. ¿Cuál es el beneficio que obtiene el ciudadano por parte del Comité de Participación Social? ¿Realmente su labor es un antídoto contra la corrupción? ¿En serio la selección que hacen de futuros funcionarios públicos es imparcial? ¿Qué hacen los cinco integrantes del CPS en estos tiempos en los que su opinión no es requerida? ¿En serio creen que se merecen los 88 mil pesos o 70 mil pesos -al parecer aún no se les aplica la reducción salarial- que reciben mensualmente?

El 24 de marzo pasado, en su colaboración en el Grupo Reforma titulada Regidores Prescindibles, David Gómez Álvarez Pérez inicia así su texto:

“Hacen poco y cobran mucho. Esa es la reputación pública de los regidores y síndicos de los Ayuntamientos. Según diversas encuestas y estudios, la ciudadanía no conoce y mucho menos reconoce a estos desconocidos, pero onerosos integrantes de los cabildos…”.

Si quitamos las palabras “regidores”, “Ayuntamientos” y “cabildos” y las sustituimos por “consejeros” y “Comité de Participación Social”, Gómez Álvarez estaría describiendo perfectamente al organismo del que forma parte y a quienes lo integran, entre ellos él mismo.

Ese mismo día, en su cuenta de Twitter anunció que en su comentario en Radio UdeG hablaría de “la desconocida pero onerosa figura de los regidores”.

¿Cuándo nos hablará de “la desconocida pero onerosa figura” de los integrantes del Comité de Participación Social?