Anteayer domingo concluyó el plazo para el registro de candidatos al gobierno del Estado y no hubo sorpresas. Claudia Delgadillo González, por la coalición Seguimos Haciendo Historia; Laura Haro Ramírez, por la coalición Fuerza y Corazón por Jalisco; y Jesús Pablo Lemus Navarro, por Movimiento Ciudadano -en estricto orden alfabético-, son los tres contendientes que buscarán ganar la elección el dos de junio y relevar en el cargo a Enrique Alfaro Ramírez.

A poco más de 15 días del arranque de las campañas, resulta difícil pronosticar quién podría ser el ganador. A diferencia de los comicios del 2018, hoy el escenario electoral es más parecido al que vivimos en el 2012 cuando el triunfo favoreció al priista Jorge Aristóteles Sandoval Díaz, pero detrás prácticamente le “pisó los talones” el ahora gobernador Alfaro Ramírez. La diferencia la marcó el interior del estado y, particularmente, los votos del partido Verde Ecologista que iba en alianza con el PRI.

Hoy el panorama es similar. El candidato del oficialismo -como les gusta denominar al abanderado del partido en el gobierno-, Lemus Navarro, está lejos de arrancar su campaña como favorito, pues al menos por ahora la candidata de la llamada mega alianza, Delgadillo González, se ha colocado a la par, gracias a la marca Morena que contra cualquier pronóstico se ha posicionado mucho mejor de lo esperado y eso puede catapultarla en el transcurso de la campaña, dejando atrás a su adversario “naranja”. Podría decirse que puede presentarse también lo contrario, pero por el momento no advertimos factor alguno que impulse al candidato emecista que no sea un craso error de su adversaria más cercana.

Jesús Pablo Lemus y Claudia Delgadillo -más allá de lo que digan las encuestas-, tendrán una salida “parejera” en el arranque de las campañas. Y en éstas, no hay que olvidar que observaremos tres debates que podrían ser los fieles de la balanza para cualquiera de los tres contendientes.

Laura Haro Ramírez arrancará en una tercera posición aparentemente lejana a sus dos rivales punteros, pero nadie puede darla “por muerta” ni mucho menos minimizar su participación, porque seguramente su discurso será el más combativo y tendrá “para dar y repartir”, pues su posición de opositora de los gobiernos federal y estatal le permitirán tener “parque” para “tundirle” a la candidata de la 4T como al abanderado de Movimiento Ciudadano. Y en este renglón, Haro Ramírez tendrá que ser muy cuidadosa de no dar señales de que su posición o postura será para favorecer a Pablo o a Claudia. Si se inclina a favor de uno de ellos, podría perder lo poco o mucho ganado en la campaña.

Durante la campaña habrá otros factores que seguramente incidirán a favor o en contra de cualquiera de los tres aspirantes, como por ejemplo la actuación que a la par tengan en sus respectivas campañas las candidatas y el candidato presidencial de las dos coaliciones y de MC. En este renglón, quien pareciera estar en desventaja es Lemus Navarro, por lo débil de su candidato presidencial.

También mucho tendrá que ver el equipo de colaboradores que acompañen a cada candidato y candidatas, y si bien ya se conoce a los integrantes de algunos de ellos, habrá que esperar al inicio de las campañas para saber con quiénes arrancan y las posibilidades de hacer ajustes en el camino.

Así, pues, todo parece estar listo para observar una cerrada contienda por la gubernatura, y la ventaja será para quien cometa menos errores para quien sepa aprovechar los de sus adversarios.

Al tiempo…