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Julio César Hernández
Que la falta de actividad en el Congreso del Estado comienza ya a causar sospechas inclusive en parte de la fracción parlamentaria del propio Partido Acción Nacional.
La decisión de no llamar a los suplentes de los diputados que solicitaron licencia para integrarse a los recién nacidos gobiernos municipales, el que no se haya convocado a sesionar y se conozca sólo que deberán presentarse el lunes 25 para que rindan protesta los próximos legisladores, y la sorpresiva noticia de que se basificará a más de un centenar de trabajadores, muchos de los cuales no cumplen con los requisitos, ha generado inquietud entre varios diputados panistas.
Y se asegura que más que inquietud, es preocupación por lo que pueda haber detrás de esta negativa a sesionar y la falta de explicación alguna por parte de quien fue su coordinador, Jorge Salinas Osornio.
Es más, un grupo de diputados panistas se han reunido con Salinas Osornio en su oficina en el Ayuntamiento -anteayer, por ejemplo- para pedirle razones de por qué no sesionan, decirle que existe una serie de pendientes que deben de desahogar en sesiones del pleno, pero el ahora regidor tapatío les da puras evasivas y ninguna razón en concreto.
Tanto es el “oscurantismo” que rodea a esta inacción en el Congreso del Estado, que estos panistas sospechan ya que pudiese existir un manejo irregular de los recursos públicos de dimensiones desproporcionadas, en el que pudieran estar inmiscuidos algunos de los coordinadores de las fracciones parlamentarias, el secretario general Alfredo Argüelles y algunos diputados de otros partidos políticos.
Ponen de ejemplo de lo anterior, las polémicas y muy cuestionadas basificaciones, entre otras presuntas irregularidades, que dicen pueden estar detrás de la negativa a sesionar.
Es más, se asegura que el Congreso tiene adeudos con Pensiones del Estado que pudieran remitirse, inclusive, hasta el inicio de la actual Legislatura.
Cuestionan también el hecho de que el ahora presidente de la Comisión de Administración, el priista Jorge Villanueva, no haya recibido información alguna de lascondiciones que guarda la misma y de los manejos realizados por parte de su antecesor, el ahora diputado federal Jorge Arana Arana.
Así, pues, el ambiente al interior de la fracción parlamentaria panista comienza a descomponerse, con el riesgo de una rebelión de aquellos que no están de acuerdo con no sesionar y que sospechan que el motivo de ello es el “cochinero” que pudiese existir en el manejo de las arcas legislativas.
¿Será así o simplemente son mal pensados?