Con la carga del desprestigio -una más en lo que va de la actual Legislatura- que significó el desaseado proceso de imposición de los cuatro nuevos consejeros de la Judicatura, el Congreso del Estado se prepara para elegir -si es que no lo imponen, también-, al nuevo titular de su Unidad de Vigilancia.

La tarea está a cargo de la Comisión de Vigilancia que preside la diputada Mirza Flores y desde la que ya se hizo el trabajo sucio de “lavar” diversas cuentas públicas que registraban millonarios cargos, como las ya muy famosas de 2015 -los últimos tres meses-, y de 2016 del presidente municipal de Zapopan, Jesús Pablo Lemus Navarro.

Mirza Flores y demás integrantes de la Comisión, con la complicidad de la Auditoría Superior del Estado (ASEJ), hicieron esa labor de manera im-pe-ca-ble.

Ahora se corre el riesgo de que ese trabajo “sucio” continúe con la elección del titular de la Unidad de Vigilancia con la que la responsabilidad de la diputada Flores está estrechamente relacionada. Y es que entre los cinco aspirantes que llegaron a la final sobresale un nombre: Israel García Iñiguez.

De García Iñiguez se ha dado cuenta en varias ocasiones aquí en Marcatextos, pero valga destacar lo revelado en las dos últimas entregas: Israel García Iñiguez… ¿el contralor “carnal” que quiere Pablo Lemus?”, del 12 de agosto de 2019, e Israel García va por la tercera… pero está impedido, del 26 de noviembre también del 2019.

En la entrega del 12 de agosto –Israel García Iñiguez… ¿el contralor “carnal” que quiere Pablo Lemus?”– apuntamos:

“Actualmente Israel García es coordinador de Información, Seguimiento y Evaluación de Programas, dependiente de la Auditoría Interna de la Secretaría de la Hacienda Pública de Jalisco, cuyo titular es Luis García Soto, tesorero del Ayuntamiento de Zapopan en el primer trienio de Lemus Navarro. Ahí también, en la tesorería municipal, trabajó García Íñiguez con García Soto ocupando diversos cargos.

“García Iñiguez fue aspirante en 2016 a ser titular de la Auditoría Superior del Estado y a quien el Comité de Participación Social le otorgó la máxima calificación: 84 puntos; sin embargo, como parte de la terna propuesta al pleno del Congreso sólo obtuvo 16 votos a favor -de los 26 que se requerían-, de los cuales 14 fueron de todos los diputados del partido Movimiento Ciudadano (…), uno más de Pedro Kumamoto, y el último de un diputado no identificado.

“En junio de 2018, Israel García fue designado delegado del IMSS en la región norte de Veracruz donde se hizo público que fue impuesto en el cargo por el entonces regidor de Xalapa, Silem García Peña, vocero nacional de la congregación religiosa La Luz del Mundo -a la que pertenece el aspirante a contralor-. Ocho meses después -febrero 2019-, García Iñiguez fue cesado del cargo, decisión festejada por los empleados del Seguro Social, pues denunciaron que durante su gestión la administración estuvo llena de irregularidades, tráfico de influencias, acoso laboral y “aviadores”, según publicó el portal “Libertad bajo palabra”, de Xalapa.

“Israel García laboró también en la Auditoría Superior del Estado (ASEJ), donde se le levantó un acta en su contra y se le dio de baja por agredir a quien entonces era Director de Administración.

“Por cierto, en los corrillos tanto de la ASEJ, del Ayuntamiento de Zapopan y del Congreso del Estado, corren versiones de que Israel García presuntamente habría participado en el proceso que tiene que ver con la Cuenta Pública 2015 de Jesús Pablo Lemus para lograr la reducción de cargos que le aplicó la Auditoría Superior por mil 282 millones 982 mil pesos y que ahora la diputada Mirna Flores, como presidente de la Comisión de Vigilancia, pretende aprobar mediante un irregular procedimiento inventado para oficializar el “lavado” de aquella Cuenta Pública”.

Y en la entrega del 26 de noviembre –Israel García va por la tercera… pero está impedido-, se destaca:

“Hoy se presenta (García Iñiguez) como aspirante a presidir la Unidad de Vigilancia, pero vuelve a enfrentar un obstáculo que los diputados no pueden ignorar y dejar pasar, como es el hecho de que tiene un conflicto de interés para ocupar ese cargo y así se establece en la convocatoria emitida al respecto…

“Israel García Íñiguez enfrenta un serio conflicto de interés por haber laborado en la Auditoría Superior del Estado (ASEJ), (…). Asimismo, laboró en el Ayuntamiento de Zapopan y actualmente en el Gobierno del Estado. Tanto la ASEJ como el gobierno zapopano y el Ejecutivo estatal son entes auditables. ¿No es esto un conflicto de interés que imposibilita a García Íñiguez ser el titular de la Unidad de Vigilancia? ¿Esto no lo advirtieron quienes recibieron la documentación de los aspirantes? ¿O todo responderá a los intereses de los diputados y no de la ciudadanía?”.

Hasta aquí lo referido en aquellas dos anteriores entregas.

Ayer, Israel García y los otros cuatro aspirantes -Juan Sánchez Beas, Eduardo Meza Rincón, Luis Alberto Vázquez Arias y Fernando Radillo Martínez-, comparecieron ante la Comisión de Vigilancia, y hoy se someterán a un examen escrito ante el también polémico y cuestionado Comité de Participación Social (CPS), que en el plazo de cinco días hábiles deberán entregar su evalución a la comisión que preside Mirza Flores, la que a su vez elaborará el dictamen respectivo para someterlo a la votación del pleno.

¿Buscará la diputada Mirza Flores -después del “lavado” de cuentas públicas-, imponer al ex colaborador de Jesús Pablo Lemus como titular de la Unidad de Vigilancia, pese a estar impedido por ley para serlo? ¿Se prestará al juego -como se prestó al “lavado” de cuentas”, el pleno del Congreso del Estado? ^¿Seguirán los diputados apostándole a su desprestigio? Ya lo veremos…

Al tiempo…